ONCE.

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—No puedo creer que acepte acompañarte en esto. —Dijo Zayn sentado frente a Louis en una mesa de la cafetería de la universidad.

—Por favor, sólo nos estamos saltando una clase para desayunar, tampoco es para tanto, estoy seguro que has hecho cosas peores.

—Muy probablemente las hice, pero ahora no soy yo quien tiene el cuello lleno de mordiscos de amor, lo que me hace creer que si tú no tuviste tiempo para desayunar esta mañana en casa, fue porqué te quedaste en cama más tiempo del debido y no creo que estuvieras durmiendo precisamente.

—Bien, tal vez tengas un poco de razón, tengo un novio apuesto y una vida sexual activa, ¡sorpresa! —Louis metió un poco de sushi en su boca. —además, para que lo sepas no me quede en la cama, fue en la ducha.

—Parecen adolescentes hormonales, estoy seguro que en estas tres semanas que llevan de novios, no hay un sólo día en el que no lo hagan por lo menos dos veces, necesitan descansar. Y no creo que sea bueno desayunar sushi, Louis, el sushi aquí es asqueroso, te podría caer mal en el estómago.

Louis volteó a ver su charola ya medio vacía, era verdad que el sushi ahí era asqueroso, parecía más engrudo que arroz, incluso lo tenías que comer con una cuchara porque si lo tomabas con palillos se desmoronaba todo.

—Es lo más decente que había hoy en el menú, tomaré riesgos —contestó mientras encogía los hombros y llevaba una porción de comida a su boca. —Y bueno, considerando que tú constantemente estás "enfermo" y te brincas las clases con el Doctor Payne, sólo que él no estudia medicina y tampoco van a la enfermera, no creo que seas la persona correcta para hablar sobre esto sin salir raspado.

—Sólo no te quejes más tarde porque te diré que te lo dije. Al final ¿qué te dijeron de la beca?

—Me la concedieron, me llegó el correo esta mañana. No creas que no noté el cambio de tema.—Louis entrecerró los ojos.

—Eso es increíble, ¿le contaste a Harry? —Zayn tenía su mejor sonrisa inocente sin querer retomar la charla anterior.

—Aún no, se lo diré más tarde.

—Bien, buena suerte. Y hay que darnos prisa, ya va a iniciar la próxima clase.

💌

Maldito Zayn y su voz de profeta, Louis había tenido que hablar a su trabajo para anunciar que no se podría presentar, el sushi asqueroso de la mañana si le había caído realmente mal, le había revuelto el estómago y cualquier olor un poco fuerte le provocaba náuseas, llevaba tres horas vomitando por cualquier cosa.

Cómo le quedaba el resto de la tarde libre, decidió ir a pasar el almuerzo a la oficina con Harry a pesar de él no poder comer nada sin devolverlo. Louis necesitaba un poco de apapachos, afortunadamente ya era viernes y podrían pasar el fin de semana en casa.

Tomó un taxi que lo llevó hasta la preparatoria en la que Harry trabajaba. Después de saludar a la secretaría y pedir permiso para acceder a las oficinas tocó la puerta que tenía grabado "Sr. Styles" en una placa de metal.

—Adelante —dijo Harry con su voz ronca detrás de la puerta.

—Buenas tardes, profesor —Louis cerró la puerta tras él. —hoy fui un chico muy malo, debería castigarme.

—No me des ideas, cariño, que podría tirar todo lo del escritorio y tomarte aquí mismo —Harry se puso de pie, tomo a Louis con un brazo rodeando su cintura y puso una mano en su mejilla. Se dieron un beso como saludo. —por cierto, ¿qué haces aquí? ¿No deberías estar en el trabajo?

—Debería, pero me siento indispuesto hoy, además quería conocer tu oficina, es muy linda, muy acogedora, puedo visualizarte regañando a los diablillos a los que das clase.

Cama para dos. LSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora