02: vete

12.1K 1.1K 305
                                    

Valeria Garza x lectora.

En dónde Valeria le advierte a su esposa que no pise el lugar de su trabajo, pero termina arrepintiendose.

Palabras: 1206.

┉┅━━━━━━━━━━━┅┉

La chica miró aquella carpeta con nervios, sosteniendo su teléfono nerviosa.

- Vamos, responde, Val, responde... - gruñó, viendo cómo no atendía su llamada.

Valeria había estado meses recopilando información sobre un hombre al que tenían que secuestrar para sacarle información, pero justo el día que tenía que llevarla la había dejado.

_____ sabía que era muy importante. Malditamente importante.

Con un suspiro la tomó, guardandola en su bolso.

Bajó las escaleras de la lujosa casa, yendo hacía el garaje lleno de autos, buscando con cuidado la llave de su auto favorito. Un mini Cooper color crema.

No era un auto muy ostentoso cómo los que tenía Valeria, pero era muy especial para ella, ya que la mujer se lo había regalado el día en el que le había pedido matrimonio.

Ingresó al auto, sintiendo el agradable aroma a limón que tenía y lo encendió, abriendo la puerta del agrage automatizada con su pequeño control remoto.

Comenzó a conducir con rapidez, tomando aquel camino que Valeria tomaba todos los días.
Era largo, algo como dos horas, tomando muchos devios y curvas, pero para ella no era ningún problema porque amaba conducir.

Al ingresar en la ciudad la chica se colocó sus gafas de sol. Era común que las personas vieran camionetas lujosas, pero autos pequeños no solían verse, mucho menos con la gran cantidad de delincuencia que había.

Cuando estacionó el auto tomó su bolso y bajó, caminando directo a la puerta de aquel lugar, sintiendo varias miradas sobre ella.
El olor a tabaco era fuerte. Ella siempre lo suponía al oler las prendas de su esposa.

A pesar de que conocía cuál era el lugar en el que trabajaba, nunca había entrado. Era una especie de lugar prohibido para ella, se lo había dicho desde que se habían hecho novias hace siete años.

- ¿Qué hace una mujer como tú aquí? - le preguntó un hombre, tocando su cabello.

______ apartó su mano, girándose nerviosa.

- Vengo a ver a la jefa.

- Ella está ocupada, muñeca. ¿Para qué quieres verla? Yo puedo ayudarte.

- No. Tengo que verla a ella.

- Ven. - dijo, tomándola de la cintura con fuerza. - Que rico olor a perfume caro tienes, ¿eh?

- Sueltame. - gruñó, intentando apartarlo. Olia a sudor y a tabaco.

- ¡¿Qué mierda crees que haces, cabrón?!

_______ suspiró, viendo a su esposa caminar con un arma en su mano. Con fuerza la tomó del brazo, alejándola del hombre al que apuntó con enojo.

Todos las miraron con sorpresa. Era usual que Valeria perdiera la paciencia rápido, pero nunca a tal punto de hacerlo en público.

- Vas a arrepentirte. - murmuró.

Con enojo la mujer guardó su arma en su funda mientras murmuraba por lo bajo, y apretó todavía más el brazo de su esposa, comenzando a caminar por el pasillo del que había salido, arrastrándola con fuerza.

Call of Duty [one shots]Where stories live. Discover now