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El cielo estaba despejado permitiendo ver un hermoso color celeste reflejarse en el pequeño riachuelo que viajaba desde la montaña más alta hasta el suelo, trayendo consigo agua limpia y helada a su vez, tan congelada que era preferible no meterse o tan solo tomar de ella.

La sensación de tener la boca helada y el dolor en los dientes no era agradable para tom quien estaba sentado a la orilla intentando meter un poco sus pies para refrescarse pero claro, estaba tan congelado que lo único que hacía era sacarlos entre quejidos e intentar undirlos denuevo esperando poder acostumbrarse a la temperatura.

Apenas tenía sus dedos del pie dentro dejó caer el resto hasta que el agua llegara a sus rodillas, tornándolas de un color rojo que ya era normal para el de cuencas, tener la piel pálida y delicada hacía que por cualquier cosa se llenara de moretones o se tiñiera de un rojo fuerte.

No pasó mucho tiempo para que sintiera su cuerpo congelarse y un escalofrío recorrerle la espalda mientras que sus dientes comenzaron a tiritar y hacer ruidos entre ellos al chocarse, indicando que le había dado frío.

Tal vez era mejor no meter los pies al rio ese día, pero claro había otra persona que no pensaba lo mismo que el de cuencas y era lo suficiente idiota como para no probar el agua antes de entrar, y el nombre d ese hombre era Tord Larrson quien llevaba solo su ropa interior y se alejaba cada vez más del río para tomar vuelo.

Tom no se había dado cuenta, estaba muy concentrado en sacar sus pies con cuidado como para saber que Tord iba a tirarse al agua.

Pero vaya que se arrepintió de no salir más rápido cuando vio el cuerpo del noruego caer al río, levantando toda el agua con la que tom había estado luchando por varios minutos y que ahroa lo tenían empapado de pies a cabeza.

Eso solo aumento el frío que tenía en su cuerpo mientras un rostro de claro enojo comenzaba a crecer en el y apenas Tord salió del agua con sus cuernos mojados se dio cuenta de ello.

-Oh perdóname, no te había visto jaja.
Comenzó a reírse y nadar en su dirección, pero el de cuencas no respondió y solo fue capaz de arrugar su frente frustrado, genial ahora debía colgar su uniforme en un árbol o algo así para que se secara.

Tom niciquiera fue capaz de mirarlo a los ojos, no quería decir nada, tenía frío y estaba empapado por su culpa mientras que el extranjero disfrutaba el agua, como es que no se le congelaba el pene? o acaso seguía caliente de la noche anterior? funcionaba como su estufa o algo así?

-Bueno si no vas a mirarme... supongo que tendré que hacer esto...
Intrigado el chico porcelana giró su rostro par ver de que hablaba pero ya era muy tarde, el agua le inundo el cuerpo haciéndolo gritar preocupado.

Ahora no solo estaba empapado, estaba en el agua abrazando a Tord del cuello, luchando por no mojarse más pero ya era tarde, su cuerpo completo estaba dentro del rio, lo único que quedaba seco era su pelo.

-MALDITA SEA TORD!
grito haciendo escándalo furioso.
-AHORA VAS A VER!
comenzó a empujarle la cabeza dentro del agua enojado para que se ahogara y sufriera aunque sea unos segundos.

A soldier's first love -tordtomWhere stories live. Discover now