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Cuando eres un bebé no te preocupas por absolutamente nada. Solo lloras, te dan de comer, muchos adultos te miran y halagan. Pero cuando te conviertes en adulto, todo es muy distinto. Ocultas tus sentimientos, levantas muros y ya no eres ese pequeño mimado: sin quererlo, eres experto en ocultar y mentir.

Así era como Louis se sentía cuando entró a la universidad, o cuando tenía los largos turnos nocturnos en el pequeño restaurante en la esquina de su apartamento. No era más ese niño que se lloraba cuando se perdía por el hospital, o que le temía a dormir solo las noches que su madre trabajaba y su abuela no aparecía por su casa. Y esos recuerdos recurrían la mente del castaño bastante seguido.

Siempre se recordó a sí mismo que debía ser valiente. Su mente le tenía presente que su padre lo había abandonado porque le temía a todo, porque un medico nunca tiene miedo de cosas tan simples como una sombra o truenos. Louis cada día recordaba las ultimas palabras de ese hombre, que si alguna vez le entristecieron, ahora lo enfurecían.

"Eres débil, Louis... No llegaras a donde yo, por eso me voy. No lo siento, tu solo debes hacerte fuerte, tal vez así llegues donde, donde estoy yo"

Louis llegaría, por supuesto que lo haría, pero no con ayuda o apoyo de ese señor al que le tenía mucho rencor. Si seguían en contacto todavía, era porque su madre le rogó porque lo escuchase y lo perdonara; lo cual nunca terminaría de entender como su madre accedió a tal cosa

Σ

— Louis, ¡vamos, mierda! Llegaremos tarde si no mueves tu culo — El morocho había pospuesto dos veces la alarma, estaban por sobre la hora, y no conseguía que el mayor abriera los ojos.— ¡!Mierda Tomlinson, que te folle, me voy!— vació un vaso de agua, que posaba en la mesita de luz, sobre su cara y lo escuchó toser exageradamente.

— Ugh, idiota, me ahogué— su voz sonó ronca, el agotamiento no faltaba— ¿Qué mierda quieres?— estaba por agarrar l edredón para taparse de nuevo, pero Zayn tiro de este al suelo— ¡Ey!

— ¡Carajo, Louis, ya vamos tarde, estúpido! —saltó de la cama automáticamente, pero se arrepintió en cuanto sintió el dolor de todo su cuerpo.

— ¡Mierda, mierda!— su intento de sentarse en la cama fue en vano, porque tiro su cuerpo en cuanto el su trasero se lo impuso— Oh, no no no, no pienso ir hoy... carajo

— Levantas tu trasero en este instante, ¿Qué mierda te pasa? solo tomaste unas cervezas, imbécil, levántate ahora.

Y sin dudas el castaño prefería perder ese día tirado en la cama viendo su película favorita mientras comía snacks, pero no era una opción valida. Intento no demostrar su dolor al caminar, y su cara lo decía; por eso su amigo no hizo comentario alguno.


Estaban en el elevador, Louis sentía la tensión en el aire tanto como Zayn a su lado. El rizado miraba al frente con los dos internos detrás. El morocho sin entender porque tan agotador el aire.

—Lou— susurró su amigo, y sabía que el mayor podía escucharlos igual —¿Por qué mierda estamos tan calmados-

—Bueno, vamos —el mayor salió del ascensor interrumpiendo su pregunta -lo que Louis agradeció mentalmente-, esperando ser seguido por ambos chicos. Entendía el rubor en las mejillas del menor y no quería que se sienta incómodo, así que decidió llevar al morocho con ellos. —Malik, ¿nunca haz estado en pediatría, verdad?

—Emm, no...

—Yo creo que debería irme

— Ve por los expedientes, Malik. Por favor.—su mirada posada aún en el castaño, aunque esté la mantenía en el piso. Cuando el morocho dobló en la esquina y nadie rondaba por el pasillo, Louis noto una mano rodeándolo firmemente por la cintura mientras unos dedos en su mentón, alzándolo.—No estás avergonzado, ¿No?

Heart Rate » l.s. [M-preg]Where stories live. Discover now