SALVAJE / SPRUAN

I

Hacía años cuando un pequeño alienígena llegó a este planeta de luz, tenía tan sólo 3 años pero era capaz de hablar y hacer cosas que los demás no. No iba a la escula, no lo necesitaba él se valió de sí mismo para cuidarse sólo, aunque era frágil podía lastimarse como un humano normal, si el dolor era más intenso este podía llegar incluso a llorar.

Los días que vivió en esa ciudad sólo escuchaba gritos cuando alguien lo veía, no era normal que alguien llevara una piel roja con unas antenas y cabello azul, apesar de eso pasaron los años y pudo conseguir amigos, uno de ellos un humano normal sin nada de curioso, otro era igual un humano pero que le nacía una llama en el pelo que él mismo controlaba, los otros dos eran híbridos para ser exactos, nunca pensó que habría tantas especies juntas... Allá en esa ciudad había un juego muy famoso que lo jugaban todo en esos momentos, El juego del calamar.

Así fue que comenzó esta historia con sus amigos, hace ya bastantes años cuando tenía exactamente veintiséis años, ni si quiera le dio tiempo a cumplir los veintisiete cuando ya estaba mal de dinero y tuvo que jugar aún maldito juego que acabó con su vida. Había tanta gente en ese lugar, poco a poco iban desapareciendo hasta sólo quedar dos personas, sabía bien a quién se enfrentaba no quería que todo acabase así... pero no había más escapatoria. En la noche los guardias dejaron un cuchillo, en ese momento aquel alien tenía miedo sabía que iba a ser el objetivo, todos ellos con trajes sabiendo que sería su última cena de algunos, tuvo que reaccionar rápido y matar a uno de ellos mientras los otros se peleaban.

— Jugador 113 eliminado... — habló aquella voz de una chica —

Solo quedaban dos, tenía que deshacerse del que más problemas pueda darle, ese era Raptor, entre dos fueron a por él logrando así matarlo de una vez por todas, se encendió la luz rápidamente y los dos jugadores que faltaban escondieron sus cuchillos en la manga para que no se los quitaran.

— Jugador 10 eliminado...

Después de aquel acto horroroso los llevaron a otra sala, ya acabaría el juego, sabían lo que pasaría.

La lluvia de fondo y él sujetando su arma, con su pelo cubriendolo la cara y sus antenas iluminandole, no tenía planeado pelear contra su amigo pero no tuvo remedio, este logro esquivar los ataques del de lentes mientras que el contrario solo recibía una y otra vez el cuchillo clavandole... asi murió tirando en el suelo desangrandose. Ollie rompió a llorar y se agachó rápido sujetando al contrario mientras lloraba.

— Lo siento de verdad, lo siento, lo siento... — repetía todo el rato, no era algo normal matar a tu amigo cada día, ese que siempre estuvo contigo — Lo siento, lo siento, lo siento tío...

Xocas murió, se dio cuenta cuando sus ojos se cerraron y ya no daba señal de vida, dejó el cuerpo en el suelo de nuevo y se levantó, miró el cielo con algunas lágrimas en los ojos, seguia lloviendo y manchas de sangre. ¿De verdad este era su destino? Acabar con todos los que el alguna vez quiso...

— Felicidades jugador 22...