Capitulo 3

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-¿Y hay alguien en los corazones de estas jóvenes estrellas?

Julieth soltó una carcajada

-Claro que no Aaron ---Le sonrío ---En este momento no me interesa salir con nadie, estoy enfocada en esto

-Bueno caballeros ya la escucharon ---El público soltó una queja y aaron miró a Julieth ---Creo que rompiste algunos corazones Julieth

Julieth sólo sonrío pero no dijo nada, así que Aaron continuó

-¿Matthew alguna chica especial?

-No, no hay ninguna

-¿Piensas igual que tu hermana o...?

-Solo no a llegado la indicada ---Asintió ---Igual, ahí que enfocarnos, el amor puede esperar

...

Por supuesto no era el fin del mundo pero sus palabras me dolieron como si lo fuera, porque un pedazo de mi mundo fantasial en el que ganábamos se estaba destruyendo

-Llamaré a Alexis ---Susurre sentí la mirada de súplica de mi hermano en mi pero no pude mirarlo. Tomé mi teléfono y llamé Alexis ---Hola...

Murmure mientras daba vueltas en círculo por el pasillo y el marco de la puerta ---Hola... ---Respondió con los mismos ánimos ---¿Ya hay noticias?

Me aclare la voz porque no creía poder hablar sin que se me quebrara la voz ---Mm bueno si. Él... Él tiene una fractura diafisiaria en la tibia... ---Susurre y oí una maldición al otro lado de la línea ---El doctor dice que podría necesitar cirugía y llegado el caso se recuperara de entre... Seis meses y un año

Oí un suspiro al otro lado de la línea y me quedé en silencio

-¿Sigues ahí Julieth? ---El silencio había sido tan eterno que creí que había colgado ---

-Si... ---Musite ---

-No te preocupes ---Repitió ---Te encontraré una pareja ¿Okey? Todo se arreglara y estaremos listos para los mundiales

Estaba claro que ninguna quería pensar en mi hermano si no en que haríamos con mi pareja. No porque no nos importara si no porque la pierna de mi hermano curaría y preocupadas o no tardaría meses en hacerlo y no estaba en nuestras manos hacer magia y arreglarlo. Esas no se arreglan así pero la búsqueda de un remplazo si se puede arreglar

-Te llamare en cuanto encuentre a alguien ---Dijo casi cerrando la conversación ---

-Espera! Mañana voy a entrenar ¿verdad?

-Debo irme la señorita Frost me espera. Te escribiré para avisarte luego ---Respondió ---Adiós

...

Math tuvo que quedarse dos días mas en el hospital y mi padre insistió en que volviera a casa y él se quedaría, no pude decir que no. Volví a mi casa cerca de las 4.30 pm me hice de comer y cene mientras veía televisión no recibí llamada alguna de Alexis, pero aun así los siguientes dos días continúe con mi rutina en el gimnasio y en la pista, solo practicaba los ejercicios que podía hacer sola, los giros y desplazamientos. Y así era mi vida, totalmente dedicada al patinaje, no salía con nadie apenas hablaba con viejos amigos o familiares, aunque llamaba a mi abuela cada día, pero no se me podría considerar una persona normal que sale de fiesta los viernes y cada tarde se encuentran con alguien.

-Adrien! ---Un grito resonó en el estadio. Ya era tarde ese martes por lo que no había casi nadie por lo que fue fácil ver de donde provenía el grito ---

Gire a ver las gradas donde una mujer con una abrigo blanco con las manos en la cintura regañaba a un joven que estaba sentado en las gradas, no podía ver con exactitud sus caras pero luego de haber gritado el nombre del joven la mujer bajo la voz notablemente, no pude apartar la vista aunque no escuchaba con claridad la discusión ambos sacudían los brazos bastante aireados, al final él se levanto y a zancadas salió del lugar, de nuevo no le vi la cara pero llevaba un gorro de lana azul celeste y una chaqueta azul oscura.

Fruncí el ceño y mire mi reloj, 6.55 quizá ya era hora de irme, volví a las gradas me senté donde estaban mis cosas y comencé a quitarme mis patines, mientras lo hacia observaba a la mujer de abrigo blanco, continuaba con las manos en la cintura hecha una furia, pronto tomo su bolso y se fue de la pista. Yo tampoco tarde mucho en irme

Cerca de las nueve de la noche mientras me preparaba para dormir recibí un mensaje de un numero desconocido

Buenas noches, Señorita Prat

El problema con su pareja a sido resuelto, la esperamos

Mañana en la pista de patinaje de la federación a las 8:30 AM

La esperamos

Revise la foto de perfil que era la imagen de una mujer realizando un salchow Mientras miraba la imagen una notificación apareció ante mis ojos

Entrenadora Alexis

Lamento la hora Julieth, y el no haberte escrito antes

No queríamos darte falsas esperanzas

Pero tengo buenas noticias, la Señorita Frost te encontró un compañero

Dice que es muy bueno, no lo conozco pero no pienso cuestionarla

le di tu numero, aun así te veo en la pista a las 8:30

Ahí te veo Alexis, Gracias

No es nada, te veo ahí

Luego respondí a Yekaterina

Buenas Noches Señorita Frost

Gracias ahí estaré

Aquella noche casi no pude dormir ¿Quién sería mi pareja? Y las mariposas del nerviosismo no me permitían dormir, en algún momento mientras especulaba sobre el día de mañana caí en los brazos de Morfeo

Odiaba estar nerviosa porque no me permitía pensar con claridad y me sentía como una tonta, por eso al día siguiente mientras me arreglaba me repetía que debía estar en calma y repelia cada respiro fuera de lugar y cada tonto cosquilleo en el estómago

Puntual como casi nadie llegue diez minutos antes y comencé a calentar. Alexis llegó minutos después

-Buenos días Julieth ---Dijo y la abrace ---

-Hola Alexis

-¿Como sigue tu hermano? ---Preguntó y no pude ignorar el destello de incomodidad que me dieron sus ojos ---

-Aun le hace exámenes, se supone que hoy en la tarde le darán los resultados ---Respondí jugueteando con mis dedos ---¿Y... Como se llama?

-No lo sé, Yekaterina es algo... Reservada. No debe tardar en llegar

Esperamos algunos minutos más pero no hubo señal alguna de ellos, volví a calentar bajo la atenta mirada de Alexis

-¿Por qué tardan tanto? ---Pregunte impaciente ---

-Le llamaré --Comenzó a decir Alexis cuando las puertas se abrieron con un pequeño estruendo, ambas giramos a ver y yo me incorpore. Yekaterina entró con un abrigo de piel vino tinto, bastante irritada se acercó ---

-Buenos días ---Saludo y respondimos ---Lamento la tardanza. Adrien es necio

-¿Adrien? ---Repetí ---

-Tu compañero, Julie ---Respondió y miró la puerta ---Ese niño... Permítanme un momento

Yekaterina se apresuró a salir y escuche un par de alaridos afuera, incómodas Alexis y yo nos miramos

Las puertas de nuevo se abrieron pero esta vez no era Yekaterina

A Frozen Kiss Where stories live. Discover now