Enamorada De Un Mafioso

Capítulo 71

EL COMIENZO DEL FIN

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|•°SERENA°•|

🥀

Hoy era el último día que estaría con Darien, pasé casi una semana con él en este departamento donde dimos rienda suelta a nuestra pasión y a nuestro amor, estaba tan contenta de haber pasado la semana más maravillosa de mi vida junto a mi esposo y nadie podría opacar esa felicidad

Luego de aquella llamada, no volví a saber nada más de mi tío Artemis, tal vez al saber que ese celular era mío llamaba constantemente pero al tener en cuenta que se trataba de él simplemente dejaba que la llamada se perdiera, estuvo haciéndolo durante toda esta semana, no me quedó más remedio que destruir mi celular, Darien me dio la razón, por que de no ser así mi tío Artemis jamás me hubiese dejado en paz. Extrañamente me sentía en paz conmigo misma eso sonaba raro pero decidí no tomarle importancia a eso y continúe como si nada

Mi esposo había salido muy temprano a Milenio de Plata no sin antes haberse despedido de mí y haber preparado el desayuno, Darien era el hombre más maravilloso del mundo, era romántico, atento, cariñoso y muy apasionado, no lo cambiaría por nada ni nadie, ese hombre me encantaba, me cuida exageradamente que aunque eso a veces enoja, me gusta por que sé que él solo me mira a mí, yo soy la que gobierna su corazón, soy la que ocupa por completo sus pensamientos y la que tiene la dicha de tocar ese cuerpo sexy al momento de compartir la cama cuando hacemos el amor

Sabía que para Darien a sus ojos solo existía yo y nadie más, nuestras vidas dependían el uno del otro más que del aire y lucharemos contra todo para lograr que nuestro amor sea más fuerte que el hierro.

Miraba el televisor, recostada en el enorme sofá, comiendo un gran tazón de palomitas era una mañana agradable, con la diferencia de que el cielo estaba cubierta por una gigantescas nubes grises se avecinaba una tormenta, era demasiado inquietante al verlas pero hoy no me preocuparía, decidí no atormentarme con esas sensaciones y puse mi atención en el televisor. En verdad era increíble estar así, sin tener que preocuparse o estresarse... Era como una vida normal

Pasaron un par de horas luego de ver una serie policíaca, me coloque una ropa más cómoda, unos shorts algo cortos junto con una blusa de manga larga, me hice una coleta y salí a la cocina para preparar el almuerzo a Darien. En algunas ocasiones, cuando tenía tiempo, suele venir a comer conmigo y platicar sobre nuestro día, tan pronto terminamos, nos sentamos en el sofá para una cariñosa sesión de besos lentos y dulces, luego de eso, volvía a despedirse para regresar a Milenio de Plata, cada que se marchaba siempre me quedaba con una sonrisa en el rostro pues tenía la satisfacción de que solía darse tiempo para mí, esta era una de las cosas que hablamos aquella noche en que llegue a buscarlo y me hacía feliz el hecho de que de Darien recordará los puntos que debíamos mejorar porque trataba de mantener nuestro matrimonio lo más estable posible.

Sin embargo me preocupaba el tema de que el FBI lo había obligado a seguir en esto para poder reunir pruebas y usarla contra la empresa y así poder liberarse de esta vida, ¿Qué pasaría si la policía no cumplía su palabra y terminaban traicionando a mi esposo? ¿Y si le hacían daño?, Todas esas preguntas rondaban mi cabeza y me ponían ansiosa pero trataba de no meterme más locas ideas en mi mente.

Todo estaría bien, si Darien había confiado en el FBI pues solo quedaba esperar el final de toda esta vida...

Ya se acercaba la hora en que Darien vendría a comer, le cocinaba su almuerzo favorito espagueti con albóndigas, acompañado de una botella de vino Y de postre una tarta de manzana, no esperaba la hora en que mi esposo entrara por la puerta, anunciando su llegada y yo corriendo sus brazos como recibimiento dejando un beso en sus adictivos labios.