𝕰𝖒𝖎𝖑𝖆𝖓𝖔 𝕸𝖆𝖗𝖙í𝖓𝖊𝖟 𝖞 𝕷𝖊𝖆𝖓𝖉𝖗𝖔 𝕻𝖆𝖗𝖊𝖉𝖊𝖘

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Tu trabajo tal vez no sea el mejor, ni el más sano para tu salud mental, pero pagaba las deudas, así que con los tacones, el conjunto de latex aceitado y las medias de red te dispusite a salir a bailar en ese caño, hoy tocaba despedida de soltero de un famoso, así te comentaron tus compañeras, era un ambiente bastante tranquilo en lo que cabe trabajar de stripper, nada de drogas ni sexo en el establecimento, si acepatbas un "trabajito extra" tenías que esperar hasta que termine tu turno, aunque el morbo y los toquetos inapropiados seguían ahí, eso jamás se iría.

Chequeaste tu playlist con el DJ y escuchaste como el presentador abría tu set, son 40 minutos más o menos que finjas demencia y te comías el mundo en tu cabeza, la mayoría del set estabas con tus ojos fijos a la luz que apuntaba el escenario, no veías a nadie y te ibas apenas terminaba la música, pero hoy fue diferente, apenas poner un pie en el pequeño escenario sentiste una mirada pesada sobre vos, no de morbo sino de inspección.

Shakira retumbaba en el pequeño cabaret, la mesa de adelante de todo había un grupo grande de hombres y uno en el medio con un listón, supiste que esos eran lo de la despedida, pero te sorprendió a no ver a nadie más, supusiste que cerraron el sector para ellos, y más si eran famosos, no se quemarían de esa manera.

Fijaste tu vista en la luz y empezaste a mover tu cadera al ritmo de "Rabiosa" de Shaki, tus manos pasaban por tu busto y bajabas lentamente por el caño, haciéndote abrir de piernas ante ellos, los gritos a veces opacaban la música y la plata caía en el escenario como lluvia.

Pusiste tus dos manos en el caño y empezaste a subir, regalandoles la mejor vista de tu trasero, rápidamente viste hacia el grupo y cruzaste miradas con dos de ellos, uno de ojitos claros y otro bastante alto, hasta sentado se notaba por sus piernas, les regalaste la mejor sonrisa de trola y bajaste del tubo quedando con las piernas abiertas en el escenario. Para el cuarto tema decidiste bajar del escenario a joder un poco con el futuro casado, nada muy zarpado porque te morirías si fueras su novia.

-"¡Dale Nicooooo!"

El chico estaba sonrojado por tenerme a horcajadas de él y lentamente pasabas las manos por su cuello, jugando con su listón de "soltero", sus amigos lo alentaban a tocarme pero el chico se negaba, lo entiendo, así que rápidamente le dejé un beso en su mejilla y me levanté de su regazo, pase por algunas sillas de sus amigos, que me dejaban la plata en el escote o simplemente disfrutaban la vista.

Cuando pase al lado de el de ojitos claros, me tomó suavemente de la mano y me hizo dar una vueltita, raramente me dejó hacer eso pero realmente era un bombón, no quería dejar pasar la oportunidad que me toque semejante hombre. Su amigo chiflo y me guiñó el ojo.

-"Hermosa"

La voz del morocho me dejo boluda y tuve que separarme porque sino le comía la boca ahí, subí al escenario rápidamente y seguí con mi trabajo, dos temas más y ya se termino mi set, le deseé buena suerte en la boda al chico y fui hacía mi camerino devuelta, no podía sacarme la mirada de esos dos chicos, eran hermosos, pero algo en mi me daba esa sensación de asco, porque realmente me querían por mi cuerpo, no por mí, pero al mismo tiempo esa manera de verme me cuesta más de 5 meses de no coger con nadie, y la cosa es que vendría necesitado de eso, una alegría aunque sea, y mejor si es con alguno de esos dos bombones y no con los viejos pajeros que vienen siempre.

Estabas tan sumergida en tus pensamientos que no escuchaste como golpeaban la puerta, ya descalza fuiste abrir y te encontraste con una grata sorpresa, era el morocho de ojos claros.

𝔒𝔫𝔢 𝔖𝔥𝔬𝔱𝔰;;𝔖𝔠𝔞𝔩𝔬𝔫𝔢𝔱𝔞Where stories live. Discover now