Todo Cambia (Spanking Parental)

Mi pequeño.

Henry Pov.

Es algo hipócrita la vida... Me refiero a que uno cuando niño, puede jurar tantas cosas y de adulto, te das en la boca tu solo.

Las verdades tan puras, que creíste a puño de hierro... Resultan ser un mierda

Y hoy, de viejo y con hijos, me doy cuenta de todas las veces que las jodí con mis padres

Dios bendiga a Mamá y su infinita paciencia y a Papá, por tener tanto amor en su corazón, cómo para no odiar al Henry adolescente y mandarlo a dormir al patio.

- ¿Tu mente no te permite descansar? - Papá venía a mi despacho.

Lo escuché desde la puerta con su voz ya ajada por el tiempo, más ronca, más lenta, más potente y sobre todo sabía.

- Pasa - Le pedí

En el fondo sigo siendo su chiquito y eso me da tanta vergüenza, cómo felicidad

Papá, acercó sus pasos y entró a mi despacho, ya en bata de dormir, pantuflas y chocolate caliente en sus manos... Me traía un "nanai" cómo le dice mi Madre a los cariños, que se les da al alma.

- Tu madre me pidió, que te diga... Qué ella fue donde sus nietos, porque son suyos y que no te atrevas a intervenir en su labor de abuelita... - Hizo una pausa a su discurso, mientras que a mí se me acomodaba la información - Y que este chocolate, es para ti amor...

La sonrisa boba en mi cara, le dijo todo a mi Papá.

- No diré nada, porque sea una abuelita consentidora con los niños... - Hice la misma pausa que papá y él vió mi jugada se sonrió y me dió mi tazón de "nanai" - Pero solo lo haré, si me traes más chocolate por las noches.

Papá se sentó junto a mi en el despacho, y solo con su presencia, me sentí tan seguro, que en ese momento supe... Que más que castigar a Clare por sus insolentes dichos o a Randon, por su rebeldía adolescente. Debía darles este tipo de seguridad.

Yo sé que si las jodo, mi padre me va a poner en su regazo sin pensarselo... James, mi hermano menor, también lo sabe... Y si tenemos o no 36 años... A mí padre le importa una hectárea de nabos verdes. Él me va a jalar de una oreja y me podrá los puntos sobre las ies... Y es tremendamente vergonzoso saberlo

Aún así, papá siempre está para mí junto a mamá. Y si estoy triste, siempre voy a tener mi chocolatito caliente.

Tras muchos minutos de un silencio relajante, papá me consultó - ¿Que has pensado?

- Que tengo la vara muy alta, cuando se trata de ejemplos de Padre... - Papá me dejó caer en su hombro.

Sentí su enorme mano, ya más pesada que antes, sobre mi espalda y fué tan relajante, que hasta sentí como el nudo de mi espalda baja se deshizo y me dió una sensación libertadora de alivio

- Quiero que siempre te sientas feliz Henry... Yo solo te quiero feliz

Yo pienso, que mi padre jamás podrá entender, lo feliz que nos hace a James y a mi.

- Gracias Papá

Tras un rato más, mi padre se fué con la taza ya vacía y el labor ya hecho.

Y estoy en paz, ya no siento ese enojo ciego que tenía en la tarde.

Sé que debo poner a mis pequeños en regla, que necesitan límites y lo voy a hacer, pero también sé, que ellos necesitan de un padre al cual acudir, cada que deban o quieran.

No puedo tenerlos tan apretados, que no me cuenten lo que desean, cómo Clare con su baile o que se arranquen por sus impulsos, cómo Randon con sus amigos y sus malas decisiones.