47

491 60 0
                                    

—¿Por qué no lo hablas con él?

—Si, tal vez lo haga y debería darle un fin a esto. Y también debería hablar con Dawon, no estamos muy contentos como antes, creo.

—Con Dawon puedes aclararlo mañana, pero podrías hablar con él ahora —indicó Jun con su cabeza hacia Joshua, quien se estaba parando de su mesa, solo.

—¿Hablas de seguirlo? De ninguna manera —Jeonghan sacudió la cabeza, tratando de quitar los pensamientos que empezaban a aparecer gracias a Jun.

—Bueno, si no lo haces tú. Lo hará la rubia, está mirando a su dirección, parece querer seguirlo.

 Lo hará la rubia, está mirando a su dirección, parece querer seguirlo

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—No me importa —exclamó con un mohín

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—No me importa —exclamó con un mohín. Y lo último que escuchó fue la risa satisfecha de su mayor cuando fue hasta donde Joshua se había ido hace unos minutos. Refunfuñando porque fue demasiado fácil de convencer.

Cuando llegó al pasillo, se dió cuenta que eran los baños de hombres. Antes de entrar se percató de una figura detrás de él, un poco confundida, como si buscara a alguien.

—Oh, el baño de las damas están del otro lado —dijo con una sonrisa cuando fue aquella rubia que antes estaba
haciéndole ojitos a Joshua en la mesa, era la persona detrás de él. Al parecer aquello fue lo suficiente para que la muchacha se disculpara y se alejara de los baños de hombres.

No era correcto de todas formas, debía respetar la privacidad de los chicos.

Cuando empujó la puerta se encontró con Joshua quien estaba terminando de secarse las manos en el secamanos (valga la redundancia) eléctrico. Jeonghan carraspeó su garganta lo suficientemente fuerte como para llamar la atención del muchacho, quien lo miró con una sonrisa al verlo.

—Hola —saludó el azabache, decepcionando un poco a Jeonghan, por la falta de su apodo.

—¿Esperas a alguien? —fue lo primero que dijo el castaño, haciendo sonreír a Joshua.

—No realmente, ¿Por qué? ¿Celoso?

—Pff, claro que no —recriminó el más pequeño, quitando su mirada de Joshua, quien lo estaba mirando directamente.

—No esperaba a nadie, solo vine a orinar. Si eso es lo que querías saber —murmuró el azabache acercándose a Jeonghan, quien respondió con un respingo al tenerlo así cerca. Joshua amaba poder tener una reacción así de fácil de Jeonghan.

—Pues alguien si esperaba verte aquí.

—¿Quién? —preguntó Joshua rozando sus narices, acción que hizo estremecerse a Jeonghan.

—No importa.

—¿Qué haces aquí de todas formas? ¿No deberías estar con tu novia? —Jeonghan se separó abruptamente cuando Joshua besó la comisura de sus labios, los labios de Joshua estaban fríos y su aliento olía a Ginebra (Lo supo supo porque fue lo mismo que él estaba tomando en su mesa), pero recordó a lo que venía.

—Me estás ignorando. No quiero que me beses —Jeonghan dijo sorprendiéndose así mismo y a Joshua pero este último no se apartó de él.

—Pensé que era lo que debía hacer —susurró en la oreja del menor, haciendo que sus sentidos se activaran ante la cercanía—. ¿Es que querías que me presente a tu novia como el chico que se está besando a su chico? No es muy buena esa idea.

—Si tienes razón —dijo Jeonghan en voz baja, jadeando cuando las grandes manos de Joshua se posaron en su cintura, atrayéndolo a él para besar su rostro—. P-puede entrar alguien.

—Podemos cerrar la puerta —le aseguró Joshua y Jeonghan lo hizo, ya que era él más cerca a ella.

Joshua agarró sus muslos y lo levantó para posarlo en la barra del baño. Uniendo sus labios en un beso hambriento y necesitado, de inmediato el más pequeño siguió el ritmo de Joshua. Esta vez Jeonghan no vaciló y dejó que el azabache introdujera su lengua en su boca. Acción que hizo sonreír al mayor.

𝗠𝗼𝘃𝗲 キ 𝘫𝘪𝘩𝘢𝘯Where stories live. Discover now