Capítulo 34

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El día de la presentación llegó, sería la primera vez que actuarían como grupo frente a sus amados blinks, las chicas se sentían nerviosas por esta nueva etapa, ya que sí bien tuvieron conciertos anteriormente como Black y Pink, se sentía diferente.

Se podía escuchar los gritos de alegría de los fans, eso las emocionaba, pero hubo un pequeño detalle que era imposible ignorar, la relación de Jennie y Lisa no estaba en su mejor momento, después de esa noche algo cambió en ellas y tanto como Rosé y Jisoo no sabían que era, solo pudieron deducir que tal vez discutieron.

—Es su momento de brillar, sé que pueden hacerlo—habló Hwang brindándoles ánimos—. Suerte y diviértanse.

Con esas palabras salieron al escenario y los blinks se volvieron locos, una sensación de familiaridad las invadió y fue ameno, fue momento de empezar con el show.

El concierto terminó y agradecieron a todos sus fans que fueron a verlas, sabían que eran populares, pero su fama ascendió como la espuma al formar el grupo Blackpink, parece que su presidenta siempre tuvo razón.

Tras bambalinas las muchachas festejaron con el staff, todo fue un rotundo éxito.

—Olvidé como se sentía estar en el escenario—comentó Rosé bebiendo agua—. Es lo máximo.

—Creo que casi me quedo afónica por estar ahí emocionada—Jisoo disfrutó muchísimo estar junto a las chicas en el show.

—Algunos de ellos ya sabían la coreografía de Boombayah—Lisa hizo un pasito del MV.

—Hubo un cartel diciendo que nos amaban, fue lindo—enseñó su sonrisa gomosa.

Lisa y Jennie cruzaron miradas, pero las apartaron de inmediato, otra vez un silencio incómodo se instaló. Jisoo quiso darles con el basurero en la cabeza para que hablen, por suerte, su actuación no fue afectada por su enredo emocional.

Oyeron unos golpeteos en la puerta y un miembro del staff fue abrir, ingresó un hombre con mascarilla y un ramo de flores, se retiró la prenda que cubría su rostro, era Kai.

—¡Felicidades chicas por su primer concierto como Blackpink!—él les entró su presente—. Lo hiciste genial allá arriba—miró a la de ojos gatunos.

—Gracias, Kai, no era necesario—Jennie estuvo alagada por el obsequio.

El resto del grupo agradeció, pero Rosé y Jisoo se dieron una mirada cómplice, observaron de reojo a la tailandesa y solo pudieron ver impotencia y tristeza, fue una imagen muy desalentadora.

Lisa no sabía que hacer o que sentir con esa escena de enfrente, ¿los interrumpía? ¿Con que derecho podría hacerlo? Cuando ella dijo que confiaba en Jennie fue completamente la verdad, pero después de esa noche ya no estuvo segura, todo fue más difícil incluso verla y ni se diga hablar. Además, no le gustó para nada las feromonas de ese alfa, apestaba a tabaco y arrugó la nariz.

—Sé que debes estar cansada, pero te invito a tomar algo, solo será unos minutos para ponernos al día, ¿qué dices?—gesticuló una sonrisa.

No es que quiera salir con Kai precisamente, pero Jennie tenía una encrucijada en sí, por el rabillo del ojo vio a Rosé y esta con disimulo le indicó que por nada del mundo acepte, luego miró a Lisa y su corazón dolió, ya no sabía como hablar con ella, regresó a ver de nuevo a Kai.

—Claro—recogió sus cosas y avisó a Jin en donde estaría—. Nos vemos, chicas.

Tal vez Kai pueda darme un consejo.

Las chicas vieron como atravesó la puerta, Jisoo con la mirada indicó a los miembros del staff que salgan, no tuvieron que pensarlo dos veces para hacerlo, ahora solo estaban ellas tres.

Black and PinkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora