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— LOS MUERTOS NO REVIVEN —
La reacción que tuvieron los adolescentes no fue para nada la esperada. Mientras Cassiopeia estaba aparte del resto, ella lo sabía y ahora se sentía mal por haberlo ocultado.
Elle, Lyra y Emma estaban sorprendidas, la Lupin pequeña pensaba que era alguna clase de broma y mas después de convivir con Sirius durante las vacaciones.
Los hermanos Harrison y Potter no podían creerlo. ¿Como podía ser posible?
— Eh... Si-Sirius — Louis comenzó a balbucear — no vuelvas a hacer este tipo de bromas.
Lo que dijo el chico dejo a los adultos desconcertados. Ya que efectivamente, frente a ellos se encontraban Lily y James Potter, y también, Marlene y Aleixander Harrison.
— Los muertos no reviven — susurro Stephanie y todos centraron su atención en ella. — ¡Los muertos no reviven, Remus!
En ese momento la pelirroja menor comenzó a sentir una presión en su pecho, su cabeza le comenzó a doler y cayó de rodillas ante el dolor que estaba sucumbiendo su cuerpo.
Harry se arrodilló ante su hermana y la tomo del rostro, Cassiopeia fue la siguiente que se acercó y comenzó a acariciar la espalda de su amiga.
— Tranquilizate — decía la Black en susurros que solo eran audibles para los mellizos Potter. — Recuerda lo que te ha recomendado Trelawney. Respira.
James estaba dispuesto a acercarse a su hija, pero Remus intervino y le dijo que no es lo mejor por el momento.
No se esperaban para nada la reacción que hubo en el lugar, notaban la mirada de Lyra y Elle, también las escuchaban cuchichear por lo bajo, Leila, Emma y Louis estaban parados a la par, esperando que Stephanie se calmase.
Parecía que poco a poco Stephanie parecía volver a la normalidad, Harry estaba al tanto de los problemas de ansiedad que su hermana presentaba debido a que era lo único que los Dursley atendían con regularidad, pero con un perfil bajo, decían que suficiente tenían con poseer magia y ahora, Stephanie había comenzado a presentar problemas.
Stephanie sonrió hacia su hermano y su mejor amiga, se puso de pie para después ayudar a Cassiopeia a hacerlo. Suspiro antes de volver la vista al frente y enfrentar el misterio que llegaba con el regreso de ellos.
