MY DADDIES. ZOURRY. TRADUCCIÓN.

CAPITULO 14.

"Ay, hijo de puta", Louis empujó la mano de Harry que actualmente estaba golpeando su costado.

"Sin malas palabras, ahora arriba. Son las 9 am y tenemos que ir a trabajar. No podemos quedarnos en casa por el resto de nuestras vidas. La dirección de nuestro trabajo está en el GPS del auto de Zayn, así que por favor tráenos el almuerzo. Aquí está mi tarjeta. Envíame un mensaje si vas a ir de compras o algo así, dime a dónde vas y te doy un límite de precio. El almuerzo a las 2 pm", Harry besó la mejilla de Louis y el hombre pequeño lo vio salir de la habitación, envolviendo la mano alrededor de la cintura de Zayn en la puerta de la habitación. Louis miró la tarjeta dorada que estaba en la mesa auxiliar junto a la cama y luego gimió, acurrucándose más en la cama.

Se volvió a dormir y no se despertó hasta el mediodía. "Pues mierda", se dijo a sí mismo, frotándose los ojos para asegurarse de que veía bien el reloj. Tuvo que ducharse, vestirse, tender la cama y salir a buscar algo de almuerzo para sus Daddys.

¿Qué quieres para el almuerzo Daddy? - Louis

El hombre pequeño envió el mensaje de texto a ambos hombres, saliendo lentamente de la cama. Tenía una hora antes de tener que salir de casa. Cuando no hubo una respuesta instantánea, Louis se puso de pie, estirándose. El plug en su trasero era grande e hizo que Louis se tambaleara un poco, pero el jovencito tenía esto. Usó el baño, limpió el plug, lo volvió a poner y luego tomó una larga ducha caliente. Su piel estaba rosada cuando salió y lo primero que buscó fue su teléfono que estaba en el mostrador, la luz LED azul parpadeante le indicaba que tenía un nuevo mensaje.

Su teléfono era nuevo, ya estaba configurado, y el joven aún se estaba acostumbrando a tener un Samsung Galaxy S5 en lugar de su pequeño blackberry. Tanto Harry como Zayn habían respondido y ambos querían cosas diferentes. Harry quería con un panini a la parrilla del restaurante a unas pocas tiendas de su trabajo y Zayn quería una ensalada de alguna tienda al azar de la que Louis nunca había oído hablar.

Una vez que ambos lugares tenían GPS y Louis supo lo que estaba haciendo, finalmente volvió a la habitación para vestirse. No estaba seguro de en qué tipo de que tipo de empresa trabajan, pero sabía que debía ser profesional si ambos vestían traje cuando se iban. El teléfono sonó justo cuando Louis se estaba abotonando un par de jeans ajustados negros. Todavía estaba sin camisa, así que se puso una camisa blanca y luego tomó su teléfono. "¿Hola?" Se inclinó para ponerse un par de calcetines.

"Louis, ¿cómo estás?" preguntó Harry y el jovencito se sonrojó, metiendo sus pies en un par de zapatos.

"Estoy bien. Preparándome para irme y llevarte a ti y a Daddy Z algo para almorzar", respondió. Agarro su billetera, metió la tarjeta de Harry en ella y luego la metió en sus jeans.

"¿Cómo se siente tu trasero? Sé que nos saltamos una talla anoche", se rió Harry, pensando en el pequeño grito que Louis dio una vez que la base del gran plug finalmente pasó por la apretada entrada de su trasero. Estaba delicioso y Louis estaba tan excitado que les hizo mamadas a ambos hombres e incluso se corrió solo.

"Está bien. Aunque me hace andar como un pato," Louis resopló, agarrando una chaqueta ligera. Harry dejó que Louis colgara la llamada, no queriendo distraerlo mientras conducía. Hacía frío ese día, siendo finales de abril, entonces salió por la puerta, bajando las escaleras hacia el Cadillac negro 2015. Louis se tomó su tiempo para mirar alrededor del interior del auto, familiarizándose con dónde estaba todo. Lo único que Louis odiaba era lo mucho que tenía que tirar del asiento hacia adelante para poder alcanzar los pedales.

Puso la dirección del almuerzo de Harry en el GPS de su teléfono, apagó el GPS del auto y se fue, asustándose cuando el auto se sacudió hacia adelante. Solo había pisado el acelerador y el trozo de metal, aunque quería correr por la carretera. "Tomará un tiempo acostumbrarse a esto", se dijo Louis a sí mismo, moviéndose en su asiento. Arranco de nuevo y le tomó algunas millas acostumbrarse a la forma costosa en que conducía el automóvil.