Alguien está en problemas...

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Al día siguiente estaba sentada en la ventana de la habitación de Lauren. Mirando el jardín trasero y disfrutando aquel sol en mi cuerpo. . Estaba sola, pero mi cabeza no dejaba de pensar en todo lo que me había pasado en el momento. La reconciliación al fin con mi primo, mi amor por Lauren... pero aun así no estaba tranquila, Hernández seguía allí afuera  aun sin saber que quería de mí, me da mucho miedo.

-Ey ____-escuché una voz debajo de mí, bajé la vista hasta el piso y allí estaba Chris indicándome que bajara con su pelota de básquet -¿Juegas?-

-Claro- sonreí y salté desde el segundo piso.

-¿Qué carajos?- dijo con sorpresa –Tú no eres humana-

Reí –Quizá no- dije y corrí hasta él pasa sacarle la pelota –Soy un alíen que te derrotara-

-Eso lo veremos- dijo sonriendo y corriendo conmigo hasta la cancha

Jugamos como por lo menos una hora, era divertido, él no era experto y me entretenía. Ya que no era competitivo, era más reírse de sus bromas y de sus comentarios.

En un momento quise sacarle la pelota a la fuerza, tirando  y  haciendo movimientos logré que cayéramos de apoco hasta quedar él a centímetros de mi boca. Me sonrió y sus ojos se dirigieron a mi boca.

"No, no, no", gritaba mi subconsciente "No lo beses" pero no pude contra él, sentís sus labios en los míos, un beso delicado, pero no duró mucho porque lo alejé de mí.

-Perdón ____ yo...-

-No pasa nada- sonreí débilmente -¿Seguimos?-

Quise hacer que no pasó nada pero mi cabeza seguía repitiendo aquella escena... ahora si estoy metida en problemas.

-____,  con Michael y Tay vamos a salir, tenemos una cena con amigos ¿No tienes problema?-

-Claro que no señora, vallan tranquilos-

-Chris debe llegar de la clase de vóley en cualquier momento-

-Bien- sonreí

Una vez que se fueron me puse a ver televisión. Estaba realmente aburrida. Pero mis pensamientos fueron interrumpidos cuando escuché la puerta abrirse.

-Exhausto es poco- dijo el chico -¿Dónde están todos?-

-Se fueron a cenar- dije

-¿Y tú? ¿Te quedaras aquí?-

-Si  ¿Por qué?-

-Es viernes a la noche, es delito quedarse-

Reí -¿Qué quieres que haga?-

-Saldré con unos amigos ¿Quieres venir?-

-Eso no suena mal, claro-

-Bien, me bañaré y tú ponte lista para ir-

-Vale, genial

Cuarenta minutos más tarde y Chris bajó con camisa negra y pantalón blanco. Muy guapo la verdad.

-¿Lista? Creo que ya vinieron-

-Sí, lo estoy- dije ya arreglada y cambiada

Salimos a la calle y efectivamente un auto azul eléctrico nos esperaba.

-Chicos ella es ____-

-Oh si, Brown, leyenda viviente- sonrió uno

-Gracias- dije en duda -¿Cómo se llaman?-

-Yo soy Nathan, Justin, y Troy—

-Un gusto chicos- dije mientras "troy" empezaba a manejar -¿Dónde vamos?-

-A un bar, todo Miami va allí, es genial-

-No es el típico bar que ves en L.A- aclaró Chris a mi lado –Hay muy buena música, y van mucho los ricachones-

-Oh-

Llegamos al mencionado lugar y empezamos con una ronda de tequila.

-¿Fumas?- dijo uno ofreciéndome un porro

-Hace mucho no lo hago- sonreí –Claro-

Había olvidado el efecto que causaba esto, sentir que uno volaba, que nada te importaba.  Empezamos a bailar, Chris siempre  a mi lado. Él decía que me cuidaba, pero creo que no quería que ningún chico se acercara mí. En si me convenía ya que si desaparecía no iba a ser bueno.

-¿No se puede repetir aquel beso?- me dijo al oído

Por lo poco que pude reaccionar gracias al efecto de la droga sonreí –No...-

-Vamos, ¿Por qué eres tan difícil? Sé que te traigo loca-

Reí -¿Por qué crees eso?-

-Tú misma lo dijiste "Me tienes loca Jauregui".-

Mi cabeza no funcionaba pero me dio para pensar eso ¿Yo dije eso?

-Ya Chris, no- dije mientras seguía bailando con sus amigos.

La noche llegaba a su fin y mi cabeza daba vueltas.

-Chris, creo que es hora de regresar, ya no sé dónde estoy parada-

-Sí, tienes razón- miró a los chicos –Vamos-

Parecía ser el líder del grupo ya que apenas lo dijo, todos nos volvimos al auto y regresamos a nuestras casas a las siete de la mañana. Con Chris de chofer ya que era el que mejor estaba de los cuatro.

-Se me mueve todo- dije mientras me acercaba a la puerta-

-Te tengo- rio mientras tomaba mi brazo –Ruega que estén dormidos porque van a acogotarnos por llegar así-

-Si- entramos a la casa y todo estaba en silencio, la luz del sol apenas lograba una pequeña iluminación cerca de la ventana.

-No hay moros en la costa, te llevaré a tu cuarto- mientras subíamos –Que raro-

-¿Raro?-

-Si, en el sillón estaba la chaqueta de Lauren...-

Y afirmativo, cuando llegamos al cuarto, la encontramos allí dormida, en su cama.

-¿Ya llegó?- dijo Chris

-Estoy en problemas- dije mientras me metía en la cama

-Suerte, yo me voy- susurró

Cerré mis ojos rápidamente, rogaba no tener olor a porro. Estaba pensado en bañarme... si, efectivamente es buena idea.

Me levanté de la cama y agachándome hasta el bolso para buscar mi ropa. Cuando encontré que ponerme me levanté y me di vuelta para encontrar a Lauren sentada en su cama mirándome.

El retorno de una estrella (Lauren Jauregui y tu)  #Wattys2016Where stories live. Discover now