Harry amaba con cada latido ser un trapecista en el circo "Legacy", desde que tuvo uso de razón, siempre soñó con ser parte del espectáculo.
Y su vida sería completamente perfecta, si no tuviera que lidiar continuamente con Louis, un malhumorado vid...
Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.
El festejo de Harry inició desde temprano.
Su madre lo despertó con un abrazo, una letanía de buenos deseos y su pastel de chocolate favorito que ella misma le horneó.
Los preparativos de su fiesta estaban cubiertos, Niall se encargó de contratar al mejor DJ de la zona y la decoración quedó lista al mediodía, con el arco de globos y una cabina inflable que mandó traer para las fotos, las cortinas metálicas brillando junto a la mesa dónde se colocarían los aperitivos.
Incluso contrató un servicio de coctelería sin alcohol que ofrecía bebidas de graduación cero, innovador y acertado.
Justamente se encontraba vistiéndose en el camerino, la función de esa noche se avecinaba y Niall le hacía compañía, tumbado en el lindo puff violeta.
—Oí que los boletos de tu show se agotaron en tres horas —masculló con algarabía—. ¿Promocionaron el acto como exclusivo?
—No, solo se promovió como un acto especial por motivo de mi cumpleaños —comentó, acomodándose los tirantes de su traje—. No me sorprende que todos quieran venir.
—La verdad a mí tampoco, estoy agradecido de no tener que comprar entrada —Entusiasmado, Niall se frotó las palmas entre sí—. Otra ventaja de vivir en el circo.
Harry le sonrió al asentir, ninguno podía quejarse de los beneficios.
—¿Tú qué piensas del atuendo? —preguntó con incertidumbre, mientras se veía al espejo—. ¿El color me sienta bien?
—¡Porque fue un martirio conseguir este modelo! —Se giró un par de veces, observando su cuerpo de distintas perspectivas—. Cuando hice la solicitud me confirmaron que tendrían la tela en color rojo y no sé por qué el proveedor no la consiguió, me hicieron el diseño en amarillo y aunque no estuve de acuerdo, me tocó aceptarlo porque ya no había tiempo de hacer cambios.
Los de vestuario le causaban dolores de cabeza y aquella conversación que tuvo con ellos, sí se convirtió en una batalla campal. Desafortunadamente, perdió la contienda ya que no hubo más remedio que conformarse con lo que le ofrecieron o de lo contrario, no tendría ropa nueva.
Al final no le molestó tanto el resultado, pero no estaba acostumbrado a ese tono chillante.
—Yo pienso que se te ve fabuloso —Fue sincero al dar su aprobación—. Además, nunca lo has usado, te hará resaltar.
—Aun así, me causa conflicto —Le dio la espalda al espejo y volteó por encima del hombro—. Aunque se me ve buen culo, creo que eso lo compensa.
—Sin el afán de sobrepasar la línea del respeto, siempre se te ve así —Niall botó una ligera risa—. Tienes buen cuerpo.
Harry frunció los labios, meneando cómicamente el trasero y se rio, apreciando la delicadeza que su amigo tenía al hacer ese tipo de comentarios.
