14-. Rocío.

5 2 0
                                    

Hace mucho tiempo,
en un lago cercano a un río,
una ninfa declamaba:
—Oh, inspiración, ¿dónde te has ido
dejando a mi pobre alma sin sentido?

Un día, un joven que paseaba
se acercó al río para beber agua.
Y al verse en aquellos ojos esmeralda
perdió la cordura y decidió ayudarla.

—No tengo corazón –le dijo, honesto y claro–.
Ni corcel, ni tierras, ni siquiera oro.
La verdad es que era un muchacho apuesto,
aunque de sonrisa escasa y muy sobrio atuendo.

¿Cuál era su dilema?
No tenía nada propio salvo una idea.
Y sin embargo, algo había en ese sitio
que le infundió valor para ser él mismo.

—Si quieres escapar, te llevaré conmigo.
Iremos a la ciudad, y de ahí al destino
–su tono de voz era firme, decidido.
—Quisiera pero no puedo, mi querido.

La razón le preguntó su compañero.
Y ella le contestó con vocablos sinceros.
—Vivo aquí, el lago es donde pertenezco.
Fuera en tu mundo me marchito y desvanezco.

—Y yo a tu mundo no puedo entrar.
¿De qué sirve un pez que no pueda respirar?
Debería irme y dejarte sola, en paz.
–¿Y no crees que ahora sea un poco tarde ya?

Diez años pasaron, y nada era igual.
Al darse la vuelta,
el hombre se dio cuenta
de que ya no era un chaval.

Asustado, se fue corriendo a la ciudad.
¿Y la ninfa? Oh, ella volvió a suplicar.
Como siempre, estaba sola,
sin tener a quien amar.

El resto ya no lo cuentan
los anales de esta historia,
pero dice antigua piedra
que sucedieron más cosas.

Un tiempo después del fuego
que abrasó la oscuridad,
se encontraron los dos ojos,
y esta vez fue de verdad.

Orilla a orilla en verano,
se acercaron más y más.
Hasta que un día perfecto,
se consiguieron rozar.

Esa tarde, su contacto
se volvió bien cotidiano.
Y siempre que el clima daba
con gran calma se buscaban.

Lo que ninguno sabía
era lo que les venía.
El día en que se besaron,
él casi se muere ahogado.

Por amor, rumores dicen,
ella fue a rescatarlo.
Y para poder sentirle,
tuvo que estar achicando.

En los cuentos nada pasa
que no esté predestinado.
Para salvar sus dos vidas
ninfa se ha unido a humano.

Al tomarlo para sí, y reconocer su amor,
vida entre ellos germinó y su poder aumentó.
La cantinela de sus vidas se tornó en cántico,
y la magia abrió la cascada de su corazón.

En ese momento, se creó un doblez.
Nadie sabe cómo, pero hubo lucidez.
Un hechizo fue dicho, una y otra vez.
Y el instante presente perdió solidez.

Años después, nació una joven cantante
que respiraba mezcla de agua y aire.
Mitad ninfa, mitad humana,
así es la hija de Ismael, el rey rana.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 21, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Poemas y cuentos de contemporaneidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora