Capítulo 21

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Me encontraba desayunando junto con alexander hasta que clara nos interrumpió.

--Disculpen las molestias, pero llego una carta para la señorita ambar, la dejó una persona a los de seguridad en la puerta--Dijo clara entregandome un sobre

Yo lo miré extrañada alexander y dejé la taza de café en la mesa para tomar el sobre con la carta.

--No dejó su nombre la persona o algo?--Preguntó alexander confuso

--No señor alexander, era un joven rubio tal vez unos 19 años me informaron, solo dejó la carta y se fue--Dijo clara

Alexander me miró confundido y yo no entendía nada.

--Gracias clara, puedes retitarte--Dije amable

--De nada cielo--Dijo saliendo de la sala

--Un joven rubio ambar? Acaso tenías algún pretendiente?--Preguntó serio

--No, claro que no alexander, no conozco a nadie así!--Dije seria

Abrí la carta y comencé a leer.

"Ambar, soy angeles, se que no quieres saber nada de mi y lo entiendo, pero necesito que sepas que nunca quise que sucediera todo esto...
Cuando conocí a tu padre me enamoré profundamente y luego de unos años naciste tú, producto de nuestro amor, tu llegada fue mágica como toda madre primeriza al criar un bebe era imposible no estresarse, seguido de eso comenzaron las peleas y discusiones con tu padre, ambos estábamos estresados y poco a poco la relación se fue apagando, si, en cuatro meses...
Una vez acudí a una fiesta por trabajo y conocí a un hombre, era casado, tenía esposa y dos hijos varones. Me enamoré a primera vista, era algo prohibido pero la fuerte atracción que teníamos ambos nos pudo más, ambos eramos casados pero eso no nos impidió vernos a escondidas, si, era su amante. Pero eso un día se acabó cuando tu padre me siguió a donde iba a encontrarme con ese hombre con el que frecuentaba, en el momento que discutimos tu padre muy enojado salió huyendo hacía la casa armo unas valijas y huyó contigo a la otra parte del mundo, te busqué por muchos años, investigué día y noche para encontrarte hasta que te encontré veinte años después. Nunca he dejado de amarte mi princesa, para mi sigues siendo esa bebe de cuatro meses que me arrebataron de mis brazos, mi error fue enamorarme de un amor prohibido, lo acepto, pero nadie tiene derecho arrebatarle un hijo a una madre. Ojalá puedas perdonarme"

--Ambar que sucede?--Preguntó alexander preocupado

Mi rostro era un río de lágrimas, no pude evitarlo.

--Es de mi mamá--Dije mirándolo y entregandole la carta para que la viera

--Ella se enamoró de un hombre casado, mi padre la descubrió y me llevó junto con el a la otra parte del mundo--Dije sollozando

Apenas podía hablar, tenía un nudo en la garganta.

--Mierda, no me esperaba eso--Dijo mirándome

--Mi padre siempre me dijo que ella me abandonó, que nunca me quiso--Dije dolida

--Déjame decirte que tu padre por despecho y rencor te alejó de tu madre, solo por venganza hacia ella, sin importar el daño que te estaba haciendo a ti--Dijo alexander mirándome serio

--No puedo creer que mi padre hiciera eso--Dije mientras las lágrimas caían por mi mejilla

Alexander se levantó de su asiento y se acercó para abrazarme, yo lo abracé aún más fuerte y mi rostro era un río de lágrimas.

--Si es que tu quieres puedes invitarla un día y hablar personalmente, pero quiero que sea aquí en la casa para tu mayor seguridad ambar--Dijo besando mi frente

PROPIEDAD DE ALEXANDERWhere stories live. Discover now