la nueva vida de karina 🔞

Capitulo 7

Me desperté en medio de la noche, inicialmente pensando que estaba en mi habitación de hotel. La luz de la luna reflejándose en el cuerpo desnudo de una mujer acostada a mi lado (la sábana se había deslizado hasta su cintura), junto con el leve tintineo de una cadena me recordó dónde estaba realmente y por qué. Mi mano se movió con cautela hacia el collar cerrado alrededor de mi cuello y hacia la cadena que lo conectaba a la cama. Una sensación de temor se apoderó de mi cuerpo. Esta no era yo. Soy una persona controladora. Siempre he estado a cargo. Sin embargo, había capitulado fácil, rápida e incondicionalmente, sin escrúpulos ni arrepentimientos, ante un completo extraño a las pocas horas de conocerla.

Me volteé de lado para verla descansar tranquilamente sobre su espalda y me di cuenta de que allí podría ser donde quería estar. Sé que ya he dicho 'Nunca lo he dicho' demasiadas veces, pero lo escucharán mucho más durante esta historia porque es verdad. Nunca he querido hacer nada sexualmente con una mujer. Oh, me he preguntado cómo sería, pero nunca tuve un fuerte deseo de averiguarlo. La mera visión de sus pezones perforados mirando al techo incitó en mí el deseo de devorarla. Mi propia mente me estaba confundiendo. ¿Qué pasará cuando deba enfrentarla de nuevo por la mañana? Nos conocimos hace apenas unas horas. Me recogió en un bar. ¿El alcohol nubló nuestras mentes? En la novedad del día, ella simplemente me enviará a empacar, a pesar de que ella había indicado lo contrario? ¿Me pidió que saliera del hotel simplemente porque estaba atrapada en el calor de la pasión? Si ella realmente quiere que me quede, ¿realmente quiero? ¿Debería? La aprensión que sentía por la decisión que podría tomar era real. Sin embargo, me volví a dormir con una sonrisa en el rostro.

El sol entraba a raudales por la ventana cuando Winter me despertó. Qué maravillosa manera de despertar. Estaba inclinada sobre mí, chupando mi pezón. Tan pronto como sintió que me movía, levantó la cabeza. Exclamé: "Ummmm, eso se sintió fantástico. Por favor, no te detengas ahora".

En lugar de regresar sus labios a mi pezón, me besó. Su lengua se precipitó en mi boca y rápidamente se retiró. "Eres una zorra insaciable, Karina. Tendremos mucho tiempo para hacer el amor más tarde. Supongo que te gustaría darte una ducha antes de irte del hotel. Yo ya me he tomado la mía". Me decepcionó esta revelación. Hubiera sido agradable ducharse con ella. "Todavía quieres quedarte conmigo el resto del fin de semana, ¿no?" ella continuó.

"¡Si, absolutamente!" Respondí y me senté mientras ella me quitaba la cadena y el collar que me mantenía atado a su cama.

Cuando regresé a la habitación después de la ducha, envuelto en una toalla, Winter inmediatamente me ordenó que tirara la toalla. "Quiero ver ese hermoso cuerpo, Karina, no una toalla". obedecí Estaba sentada en el borde de la cama esperándome. Su única ropa era un par de jeans. Mis ojos se movieron inmediatamente a los anillos de cromo que colgaban de sus pezones. Me cautivaron. Palmeó un lugar en la cama junto a ella y dijo: "Siéntate, cariño. Tenemos que hablar". Nos giramos para mirarnos, las piernas sobre la cama. Eso le dio una vista maravillosa de mi coño afeitado. Deseaba poder ver los de ella también, pero acepté sus pezones anillados como un gran premio de consolación. Me gustó mi punto de vista y asumí que a ella le gustaba el de ella.

"Quiero leerte algunos pasajes de un libro, Pet. Se inclinó y tomó un libro que estaba sobre su almohada. Es 'La historia de O', un libro clásico sobre ataduras y disciplina".

"No quiero decepcionarla, señora, pero ya lo he leído".

"Ahora ESTE es un libro que nunca hubiera pensado que habrías leído".

"Mi novio lo dejó en la mesa de café y me sugirió que lo leyera. Tuve la curiosidad de hacerlo".

"¿Qué pensaste?"

"Mis emociones estaban totalmente en conflicto. Admito, solo ante ti, que estaba sintonizado. En ese momento, sabía que nunca aceptaría ninguna de las degradaciones que O tuvo que soportar. Entonces, le mentí y le dije fue la historia más repugnante que he leído. Cuando sugirió que le gustaría probar algo de bondage, le dije que si lo hacía, inmediatamente saldría por la puerta".