Ezequiel "Equi" Fernández.

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Stereo hearts.









Stereo hearts

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— ¡no entiendo por qué tengo que estar acá, Nicolas! —le digo por celular a mi hermano mientras camino hasta mi lugar, pasando entre la gente, el griterío y movimiento.

— ¡se confundieron al darnos las entradas, Mica, no es mi culpa, te quise acompañar pero estamos en distintos lados, además tenes un lugar muy privilegiado, estas re cerca del campo, vas a ver a todos ahí.

— ¡ay, no te hagas, que vos lo que más querías era estar con los del quilombo!

— ¡no te voy a mentir estoy re matado de felicidad hermana! —Grita muy feliz. —pero ni bien termine voy a ir corriendo a donde vos estés para buscarte, no te preocupes, eh.

—si, si... dale. Después te veo. Tene cuidado.

   Finalizo la llamada y me siento en mi lugar mientras acomodo mis cosas encima mío. El lugar  que tenía era detras del arco, muy cerca de todos, hasta podía ver muy bien a los jugadores que estaban empezando a salir al campo de juego, y debo confesar que es la primera vez que los veía de tan cerca.
Decido sacar una foto del lindo estadio donde estábamos de visitantes, mientras se van acomodando para patear al arco. Hoy Boca se enfrentaría a un gran equipo, así que estaba expectante.


Agus:

"Micaaaa"
"Todavía estoy trabajando"
"Saca muchas fotos que odio no poder acompañarlos"
"😭"

"Si no le hubieras roto el corazón a tu jefe probablemente estarías acá"
"🤣🤣🤣"

Agus:

"Boba"
"Sos malísima"

📷Foto.




    Envío aquello y voy a guardar mi celular cuando escucho gritos de repente, alguien quiere poner la mano delante de mi cara y todo lo que veo es una pelota viniendo directo a ella.
Todo se vuelve negro por unos segundos.
Abro los ojos, y todas las miradas vienen a mi.

— ¡un pañuelo! —gritan y se ponen a mi al rededor, me doy cuenta que algo cae desde mi nariz; me toco, y veo mi peor pesadilla: sangre.

— ¡¡ay, sangre!!

—tranquila, tranquila, no te preocupes, está bien, linda... —me dice una señora mientras me tapa la nariz con algún pañuelo, y ahora toda la cara me duele.
Veo que algunas de las personas se van de mi al rededor y se acercan hasta las divisiones del estadio y el campo de juego, a ver a algún chico acercándose.
Miro para alli y entonces me doy cuenta de que aquel jugador es el que me había pegado con la pelota.

Historias cortas 2 //futbolistas//Where stories live. Discover now