𝐋𝐎𝐕𝐄? │ Tom Kaulitz

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟑

"Lonely"

Jenna había creado algo hermosamente pesado con los sentimientos de la noche anterior, quiso hacer algo realmente importante con ello, y mantuvo oculto el cancionero, ya que era lo único que le quedaba.

Sus padres habían tomado la decisión de trasladarla de su habitación al ático.
Lo único bueno de ello es que por lo menos era habitable, este tenía una sola ventana pequeña que daba vista al jardín, era la única luz natural que veía cuando estaba allí, ni siquiera podía abrir la ventana para sentir el viento, ya que esta no se abría o la fuerza de Jenna no era suficiente para poder abrirla.

Pero a todo esto, ¿Cuál era la razón de los padres para "encerrarla" allí arriba?

Resulta ser que se enteraron por vecinos que su preciosa hija, se estaba escabullendo por la ventana de su cuarto y rápidamente le contaron al señor y señora Bennet.

Los padres estaban impactados porque su hija realmente estaba mal, se escapaba, les gritaba, lo curioso es que ella no era así, pero sus padres no optaron por echarse la culpa, es más pensaban que su hija tal vez estaba consumiendo sustancias ilegales o estaba en su etapa de rebeldía.

Antes de dejarla encerrada allí para que "recapacitara" le explicaron las reglas que había.

―Primero, no saldrás de esta habitación a no ser que necesites ir al baño, ducharte o alimentarte ―pausó Víctor―, por los horarios de la comida no debes preocuparte ya que nosotros te vendremos a buscar para que comas con nosotros.

―Segundo, estarás en esta situación por dos semanas completas ―continuó Nathalie.

Jenna se tensó automáticamente y tragó brutamente saliva.

―Tercero, si no mejoras en dos semanas, lamento decirte que te quedarás más tiempo del planeado ―finalizó el hombre.

Ambos salieron juntos del cuarto, cerrando la puerta con seguro a su paso. Jenna trató de ir detrás de ellos, pero fue inútil.

Escuchó perfectamente como la llave giraba, entendiendo que realmente no había salida y en estado de shock por darse cuenta de que sus padres realmente la habían encerrado.

No tuvo a nadie para hablar, más que su cuaderno en las noches de insomnio, o en cada comida con los monstruos que se hacían llamar padres. Aunque tenía la oportunidad de hablar con ellos, durante la primera semana en esa situación decidió no hacerlo, no iba a ceder.

¿Cómo se sentía Jenna? No es sencillo, pero imagínate la situación...

Tener la oportunidad de cumplir un sueño, tenerlo tan cerca de tu vida, pero para cumplirlo debes dejar algo que es muy importante para tu familia, pero que tú sabes no te dará la felicidad ya que es algo que no quieres. Sumándole el hecho de ver a tu padre arrebatarte parte de esa felicidad, ocultándote cosas que son muy preciadas para ti o destruyendo tus pertenencias en tu cara.

Ver a esas personas y verlas con confusión, debido a que no son las personas que recuerdas, o no se portan como solían hacerlo.

La gota que derramó el vaso de sentimientos de Jenna, fue el encierro, uno injustificado, el cual la dejaba tonta, dolida y en soledad, ella no tenía a nadie a su lado sobando su espalda y diciéndole que todo estaría bien, que no la dejaría sola...

Eso sentía ella, la pequeña chica lloró cada noche que pasó en el ático.

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A mediados de la segunda semana Jenna se sentía cansada y no podía soportarlo más, su cuaderno iba a explotar de todo lo que había escrito. Eligió una de las hojas del final y la arrancó.