5. El Barco Mar Adentro, Y Más Adentro 😏...

7.4K 104 2
                                    

Entre tantos roces, movimientos, persecuciones juguetonas, miradas, caricias y lamidas, la ninfa de la selva, totalmente desinhibida se posó sobre el simio. El cuerpo de mujer era más grande que la de él, y ella empezó a contonearse, movía sus caderas para los lados, frotándose contra los pelos y piel caliente del mono. Puso sus brazos cerca de la cabeza del hominido quien solo contemplaba esas tetas enormes que ella empezó a pasar sobre su boca, su nariz, sus ojos...

Las arrastraba por completo, dos melones solo para él. Eran tan suaves y tibias, mojadas por la saliva del simio quien, saciado a más no poder, las chupaba, lamia y tocaba por todas partes. Esas manos nunca habían tocado tanto y por tanto tiempo, ese mono por primera vez conocía lo que era el erotismo humano, algo evolucionado para su especie. 

Sin embargo, estaba aprendiendo. Sus manos las pasaba por toda ella, por las piernas, la cintura, la cadera, las tetas, más nalgas.. Y Sarah, super excitada, juntando su carne lo más cerca del simio, con caricias cada vez más íntimas, no podían estar más pegados y cercanos uno al otro... parecía como un muñeco sexual para ella, con quien se dedicaría a satisfacer todas sus necesidades sexuales. Ese mono ya era suyo... y le estaba cumpliendo a la perfección en todo lo que le pedía.

En medio de más movimientos del cortejo instintivo, el animal encontró la forma de penetrar a la fémina naufragante que ya estaba en el piso postrada sobre sus rodillas, sudorosa y bien bien caliente. El horno estaba listo.

El simio, puso sus gigantes manos sobre aquel trasero delicioso y comenzó a empujar y meterse en ella. Ahí, sintió y conoció por primera vez el verdadero calor profundo de una super modelo. 🔥

Ella al fin sentía de nuevo una verga animal y simplemente se dejó llevar. 💓💓 Era una verga delgada y más pequeña que la del pinche orangután, rey de la selva en la que ella fue dominada. Aquí en cambio, ella era la dominante y la que marcaba el ritmo del placer que quería obtener, egoístamente.

El barco comenzaba a balancearse pero no se sabía si era causado por tanto movimiento que hacían los dos dentro de esa cabina o por el deseo de las olas que querían que ese encuentro sexual ínter-especie durara más y más. Sara no soportó más, estaba sufriendo esperando más y más placer. Así que tomó las manos del simio y las dirigió a acariciar sus tetas, moviéndolas de un lado a otro, estimulando sus pezones, pasándolas por en medio de ellas, poniéndolas en su cuello, queriendo ser asfixiada.

Y el mono lo entendió a la perfección. Sin parar de moverse dentro y fuera de ella con su verga, éste empezó a hacer fuerza de su mano sobre el suave y delicado cuello de ella. Eso la encendió mucho mucho más, empezando a gemir más fuerte... Después, llevaba esas manos anchas y oscuras pasándolas por su cintura, sus caderas, sus piernas, sus nalgas y su clitoris. El mono era sumiso, pero aprendía muuuy rápido, eso le encantaba a ella. Todo este tiempo la intención de Sarah se trató de enseñarle cómo cogerse a una hembra como ella. Y a ella le encantaba "enseñar". 😏

Qué placer sentía Sarah en ese momento....!! Había pasado más de 1 hora desde que el simio entro a esa cueva del sexo, y los jugos de la fruta enlatada ya no eran necesarios, ella estaba secretando sus propios jugos embriagantes y exquisitos que hacían de cada tocamiento, algo resbaloso, viscoso, delicioso y placentero; casa vez podía ser penetrada con más profundidad y rapidez. Sarah no paraba de gemir, ese canto de hembra que resignifica y activa la virilidad escondida de cualquier macho que lo oye.... Ahhh! Mhhhh.... Ah ah.. Ohhhh!!!💓💓

Ese pinche mono había ido por comida y sació todas sus necesidades básicas y espirituales que hasta el Destino le concedería renacer en un humano por el buen desempeño que hacia con esa Diosa. Sarah continuaba teniendo tocamientos por todos lados, su carne y piel era estrujada y agasajada, apretones en sus zonas más sensibles y roces constantes por dentro y fuera de su vagina la hacían llegar a su límite 😱🤩💕

El simio eyaculó dentro de ella segundos después con sus exclamaciones y contracciones, y al sentir su semen caliente fue detonante para su primer orgasmo de Sarah. Había aprendido a desear algo, incluso algo tan bizarro como eso y no a solo ser objeto de deseo, como siempre había vivido en la ciudad y civilización humana en que había crecido. Ahí en esa isla era su deseo el que había encontrado y ahora ella era la encargada de saciarlo a su merced.

Los espasmos de esa mujer sorprendieron al simio, y ella, terminó con una sonrisa acostada y relajada con su cuerpo dejado a voluntad en el piso... Se tocaba el vientre y no podía hablar (acaso era necesario poner palabras a todo lo que había vivido?), intentando apaciguar sus contracciones que estaba teniendo en ese barco.

Con su cuerpo totalmente vivo, se le ocurrió algo en mente a aquella modelo. Se levantó y tomó una mano del simio, miró sus dedos, sus pliegues, su textura, su tamaño y su grosor. Llevó uno de ellos a su boca... Y lo chupó.

Ya todo húmedo y ensalivado se lo metió de nuevo y lo acarició con su lengua alrededor, en la punta y por todos lados al tenerlo dentro de su boca. Pero Sarah no se quedo ahí. Quería experimentar, quería aprovechar totalmente a ese animal inocente, maleable y obediente.

Asi que, tomando el 3er dedo (el más largo), lo dirigió lentamente a su vagina. Lo frotó contra su vello púbico, el cual estaba todo húmedo, lo pasaba sobre su clitoris y sintió una explosión de placer nuevamente 💜.
Después, se metió el dedo poco a poco en su vagina y el "mono suertudum" solo seguía ordenes. Órdenes corporales que no ocuparon sonidos ni palabras para entenderse. ¿Acaso el verdadero sexo, el real encuentro sexual entre dos animales cachondos, libres y calientes necesita hablarse?

Con ese dedo dentro de ella, ancho, con textura que ningún consoladora o vibrador puede igualar, lo metía lentamente y ella temblaba de placer.. Sus piernas se tambaleaban, tal cual ciervo recién nacido... y después de que lo había metido todo hasta el fondo de su vagina, lo sacaba despacio disfrutando el roce que tenia tanto los pliegues de su vagina como los de ese dedo bendito. Salía cada vez más jugoso y húmedo.

Sarah parecía una niña conociendo un nuevo juego, un nuevo juguete, y estaba maravillada por todo.. un placer mejor que cualquier droga, un placer prohibido, impensado, fuera de lugar, satánico para otros, anti moral para muchos...

Y en esa isla comenzaba a sentirse libre, siendo solo ella con su naturaleza y sus necesidades, sin expectativas o prohibiciones sociales, lo exótico de ese raro encuentro sexual le excitaba demasiado.

Sabía que estaba a punto de llegar a su climax más grande... Había pasado más de 2 horas de intensa actividad sexual y el mono, curioso, expectante y maravillado por tales enseñanzas se convirtió en aprendiz sexual. Empezó a copular a la hembra que tenia enfrente con sus dos dedos más grandes y largos con una velocidad mucho más rápida.

Eso sobrepasaba lo esperado por Sarah, quien exclamó: "Ahhh😱, no puedo con esto! Son muy grandes!! Tengo dos dedos de simio dentro de mi!!, gritaba entre gemidos y alaridos de dolor, "me muero!". Sin embargo, ambos dedos entraban tan fácil porque ambos estaban mojados de sudor, líquido seminal, jugos vaginales, saliva, fluidos extraños y más. La voz de Sarah era entrecortada con movimientos más furtivos y excitados. Cuando de repente, ella miraba la luz al final del túnel del sexo, al fin llegaba a su destino... Sus ojos se pusieron blancos y su voz exclamó el canto de su victoria orgasmica: "ahhhhhh hhhggg....!!".🌹🔥🔥💥

Ese cuerpo brillaba de sudor y de belleza contorsionándose y arqueandose de placer puro. Es la escena que todo ser amante y deseante de mujeres desea ver: Una mujer realmente satisfecha y feliz en pleno orgasmo máximo...

Sara no podía esperar más de esa isla, todo lo que pudiera pasar en los días siguientes ya le daba igual.

Quería quedarse con ese mono por siempre, quería volver a la selva para ser devorada nuevamente...

Quería tantas cosas... pero necesitaba dormir 😴 y así lo hizo.

Sin embargo, ninguno de los dos sabía que el barco había dejado la costa desde hace 1 hora y ya era de noche.

Pero eso no importaba ahora, Sarah, se había quedado dormida, exhausta, desnuda y abrazada a ese joven simio mientras el barco se dirigía hacia... Alguna parte.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: May 13, 2023 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Un manjar en la selva  [+18]Where stories live. Discover now