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Después del almuerzo en el comedor y la ducha donde Yeonjun mantuvo a Beomgyu prácticamente pegado a su costilla, volvieron a la celda y sin importarles que el guardia mandara a Yeonjun a otra celda se decidieron por dejarle a Soobin la cama de abajo y ellos dos dormirían en la cama de arriba.

Yeonjun no se alejaría de sus compañeros solo porque un guardia tuviera la osadía de ordelarle cosas. Con una mirada afilada bastó para hacerlo desaparecer.

-Por favor no hagan nada conmigo durmiendo debajo de ustedes -suplicó Soobin- estoy indispuesto.

-¿Te duele mucho? -Beomgyu preguntó severamente preocupado- ¿No quieres que pidamos más pastillas para el dolor en la enfermería.

Soobin negó y se recostó boca arriba.

-A penas siento dolor, solo les pido que se controlen esta vez. Mañana por la noche estaremos en casa y podrán hacer lo que quieran.

Yeonjun arqueó las cejas sorprendido porque Soobin supiera que su plan era irse a penas se hicieran las doce al día siguiente. El plan de Taehyun solo funcionaria si se iban lo más pronto posible.

-No te prometemos nada -dijo Yeonjun alzando a Beomgyu de la cintura hasta sentarlo en la cama de arriba.

-Buenas noches -musitó el castaño a lo que Soobin solo resopló en señal de rendición.

Yeonjun se subió de un brinco y Beomgyu pegó su espalda de la pared. No era una cama muy espaciosa pero cabían si estaban lo suficientemente juntos, el techo de la celda era bastante alto y eso les daba la libertad de sentarse y moverse sin rozar el techo.

-¿Vas a dejarte la ropa? -Yeonjun preguntó en un susurro ronco al notar que el menor planeaba dormir vestido.

Ellos siempre dormían en ropa interior o desnudos.

-Soobin me dijo que no me la quitara estando aquí -explicó- podría pasar algo y no es recomendable salir desnudo en una emergencia.

-Quitatela para mi, yo voy a protegerte.

Beomgyu dudó, pero Yeonjun no le dejó más opción al bajarle el cierre de su traje naranja de una pieza. Debajo solo llevaba la ropa interior.

Se sentó para deslizar la parte superior por sus hombros y cuando su pecho quedó al descubierto extendió sus piernas para sacarse la parte del pantalón.

Yeonjun tiró la fea prenda fuera de la cama.

-¿Y si me da frío? -cuestió el castaño.

-Me abrazas.

-Pero tu aún llevas ropa -reclamó.

-Uno de los dos debe mantenerla puesta -dijo igualmente desabrochando el suyo hasta la cadera, dejando su torso tatuado al descubierto.

Beomgyu se limitó a subirse a su regazo y descender con parsimonia para darle un beso.

-Te extrañé, Junnie.

-Yo a ti también bebé.

-La última vez fueron cinco meses, esta vez por lo menos no te tardaste tanto.

-Lo siento por la otra vez.

Ya se había disculpado un millón de veces, pero seguía reclamándose a si mismo por haber tardado tantos meses tras las rejas sin encontrar una forma de escapar.

Había arrastrado a Soobin sin quererlo y no quería que el resto del grupo se involucrara en su huida, y ellos, después de muchas riñas, terminaron por aceptarlo. Quien peor lo pasó fue Beomgyu, quien se negó a siquiera visitarlos por lo molesto que estaba de que no hubieran aceptado su ayuda.

Prisión | yeongyu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora