volkacio [ drabbles ]

Pasar frío juntos

• soft
• volkacio doméstico <3
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Tras la llegada del invierno, las fuertes ventiscas no se hicieron esperar, siempre acompañadas por tormentas de nieve que enfriaban todo a su paso.

Tan solo fue cuestión de tiempo para que la ciudad nuevamente se pintara de blanco, dejando ver un clásico paisaje invernal en lo urbano.

Su hogar no era la excepción. En pocos días esta se dejó cubrir por la nieve; el tejado, la piscina, incluso la entrada.

Esto último resultaba bastante molesto, todos los días eran una lucha para quitar la nieve acumulada cerca de su puerta. Simplemente no entendían por qué se formaban pequeñas montañas en medio del camino. A pesar de aquel inconveniente, los dos siempre hallaban la forma de apartarla, y así entrar a casa una vez más.

Cuando regresan del trabajo durante esta estación, se aseguran de avivar y mantener esa calidez hogareña que tanto les caracteriza. Para ello tenían su propia rutina; tomaban una buena ducha caliente juntos, vestían ropa cómoda y abrigada, el de cresta ayudaba a su pareja a cocinar para luego cenar sentados en el sofá.

Esa era su parte favorita, siempre lograba convencer al ruso de cenar en el sofá porque, según sus palabras, es la mejor forma de compensar el frío. Si bien de alguna manera esto era cierto, también se volvía la excusa perfecta para estar más cerca de su esposo.

El peligris ya conocía esa estrategia de Horacio, mas nunca se la negaba. Admitía que su idea fue bastante buena, un momento reconfortante luego de muchas horas de trabajo, que también se volvería de sus favoritos en el día.

Solamente se levantaron para lavar los platos y acomodarlos en su lugar, tan pronto terminaron la tarea volvieron a su comodidad.
Ahora recostados, Horacio se acomodó sobre el pecho del mayor. En su posición lograba escuchar los latidos de su amado, tan tranquilos y rítmicos, una melodía pacífica que le llenaba de calma.

La manta ayudó a resguardar el calor de ese abrazo, y sonrió al percibir suaves caricias en su cresta. Su mirada bicolor se encontró con la azulada de su marido, quien también le regaló una ligera sonrisa.

—Estás muy cariñoso últimamente, ¿no?— comentó divertido.

—¿Eso crees?

—Sí, y me gusta. Bueno, en realidad tú siempre me gustas.— respondió, consiguiendo que el ruso soltara una risita. Sin apartar la mirada las caricias siguieron, y luego de suspirar habló de nuevo. —A esto me refería...

—¿Con qué?— le preguntó curioso.

—Pasar frío juntos, estar los dos aquí tumbados, relajados y calentitos...— y apoyando su cara de vuelta en el pecho de su amado cerró los ojos. —A esto me refería.

Volkov comprendió a Horacio. No importaba que tan fríos sean los días, o que tan sencillas sean algunas situaciones; mientras están juntos, todo se volvía más especial.
En la cotidianidad es algo que disfrutaba mucho, algo que le enseñaba la belleza en aquellas cosas simples. Algo que le demostraba que vivir valía la pena.

—Me gusta que pasemos frío juntos.— contestó finalmente.

—A mi también... ruso, ¿podemos dormir aquí hoy? No me quiero levantar.— una vez más rió por el comentario de su pequeño.

—Está bien, quedémonos aquí esta noche.

Él compartía el mismo sentimiento que Horacio, ambos estaban tan cómodos que no deseaban moverse por nada del mundo.
Su pareja se puso contenta al escuchar la respuesta, y no dudó en besar sus labios casi al instante.

Y allí se quedaron el hermoso par de esposos, durmiendo en el sofá esa noche invernal. Abrazados y calentitos, gozando de pasar frío juntos.
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Fin<3