Blood runs thicker than water (James Sirius x tu)

Cap. 11

Narra Astrid:

Teníamos cientos de cosas que hacer así que aunque estábamos en la sala de menesteres no hablábamos con nuestros padres ni ellos a nosotros,  estábamos en estrés y envueltos en libretas y libros.

No supe que paso ayer después de que me fui pero hoy en la mañana me aterraba que uno de ellos se hubiera dado cuenta de que James y yo éramos más cercanos de lo que nunca quisieron, aun así si lo hicieron están siendo piadosos al no mencionarlo.

Se me olvidaba su presencia hasta que de vez en cuando preguntaban algo, lo que nos enseñaban había cambiado además de que ya no usábamos pergamino o plumas de tinta, ya eran cosas muggle como libretas y plumas normales aunque con sus modificaciones, el que mi pluma cambiará de color o mi libreta pudiera cambiar de hoja sola tranquilizo a mi papá de mi interaccion con cosas que no pertenecían al mundo mágico.

Por debajo de la mesa lo más discreto que pudo Cornamenta tomó mi celular escondiéndose lo, ya les había explicado lo que era cuando vieron que copiabamos una tarea de el, las opiniones sobre el objeto estaban divididas al menos fue a una distracción a que teníamos las mismas tareas, en realidad así funcionabamos cada quien hacia la tarea de ambos de las materias que entendía, hasta en eso éramos diferentes y encontrábamos la manera de complementarnos

Tío Ron pregunto varias veces si los profesores no nos tenían preferencia a lo que no pude evitar soltar una carcajada, nuestra expectativa era ser muchísimo mejores que ellos, me sorprendía que dijeran esa clase de cosas cuando ellos sabían lo que era que la gente tuviera expectativas maravillosas sobre ti mientras tu sentías que no podías con todo eso.

Me comencé a tocar la marca en mi brazo algo enojada, tratando de explicarles por que estaban mal de una manera pacífica, mi tono era agresivo lo notaba por sus miradas, James puso su mano por encima de la mía relajándome, con más clama que yo les narro un poco de como todos nos trataban pero su mirada se iba a mi de vez en cuando, sabía leerlo a la perfección y lo que me decía me estaba haciendo enojar.

Que no estuviera tan resentida, ¡¿como se atrevía a pedirme eso?!, ¡¿como se atrevía cuando el sabia perfectamente todo lo que me había pasado?!, todo lo que nos había pasado, teníamos una vida buena eso no podía negar, había cosas envidiables en ella, como nuestro dinero, nuestro estatus y lo amorosos que eran nuestros padres con nosotros pero no todo era rosa, nada lo era.

Los insultos, los golpes, las crisis, que somos la debilidad más fácil de alcanzar, todas esas veces que debimos de correr de personas que querían hacernos algo, el lo sabía a la perfección, todas esas cicatrices en mi cuerpo demostraban que nuestra vida no era perfecta por más que los demás lo creyeran o que nos odiaran por eso.

La chispa de ira se encendió en mi cuando recordé todas esas veces que me consolo mientras lloraba, me defendió, llego a golpear gente por mi, hacerles bromas tan crueles que nos tenían miedo de solo vernos, insultos que los dejaban llorando, todas esas veces que me prometió que nadie me volvería a hacer algo, que me dijo que no me dejara de nadie, que yo era lo más importante en su vida, que haría pagar a cualquiera que me lastimara y a pesar de todo la perdono, la perdono y la volvió su novia.

Ignoro absolutamente todo, quise por un segundo culpar me a mi misma, decir que era mi culpa por no haber hablado de mis sentimientos pero no, yo había sido obvia y aunque no, el seguía siendo mi mejor amigo, era responsable de sus propias acciones, no solo me hacía daño a mi, se lo hizo a todos los que queremos, nos acerco a alguien que era un peligro, no solo me había traicionado a mi, traicionó a todos a los que ella nos había hecho daño.

Le arrebate mi brazo y los dos dejamos de hablar, susurro un lo siento pero siempre lo hacía, se discúlpaba cuando ni siquiera sabía porque estaba molesta, ninguno de los dos siguió, nos mirábamos y prácticamente le aventé sus libretas a la cara, tía Hermione hacía preguntas queriendo liberar la tensión que para ellos salió de la nada, era inútil preguntar sobre los cambios en el castillo, la respuesta era corta, los destrozos de la guerra.