En el cine

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Me encanta ver películas los martes en el cine de al lado de mi casa, mi amiga trabaja y me dijo hace un par de meses que a las 2 de la tarde nunca va nadie, y a mí que me encanta estar a solas en la sala me encantó la idea de convertir en rutina ir cada semana, ella me colaba y ni tenía que gastarme dinero, a cambio yo le regalaba los cafés del Starbucks donde trabajaba que me daban gratis por ser empleada, las dos ganábamos.

Hoy me tocaba ver una de amor romántico, no era mi genero favorito pero el reto de cartelera eran dibujos para niños pequeños así que era eso o pepa pig.

Cogí mi bol de palomitas y mi bebida y me dirigí a la sala, el mejor sitio sin duda era en la parte de atrás del todo en el centro, la pantalla se veía genial y los altavoces alcanzaban el sonido perfecto.

Los anuncios empezaron a pasar y justo cuando estaba a punto de empezar la película una joven entró en la sala. Al principio no me gustó que viniera, este era mi momento de la semana para disfrutarlo SOLA no quería que una extraña viniera a hacerme compañía.

La joven que empezó a acercar y se sentó  Justi al lado mío, había una sala ENTERA vacía y justi se tenía que sentar a mi lado.

-Perdon que me siente aquí, es que es el mejor sitio de la sala.

Bueno al menos tiene buen gusto.

-No te preocupes no me importa.

Yo solo pido que no sea de las que habla en el cine.

La película empezó y se puso a mirar el móvil, yo no me lo podía creer, que clase de persona va al cine a mirar el móvil.

La miré para regalarla por qué su brillo me molestaba, pero no articule ni una palabra por qué el brillo le iluminaba la cara y juro que es la cara más bonita que he visto en toda mi vida.

Me puse nerviosa. No me había dado cuenta hasta entonces de cómo era, su pelo, sus labios, sus ojos, todo era como sacado de la televisión.

Al rato se levantó del asiento y se marchó, por inercia aproveché para ver su cuerpo, me quedé embobada. Su culo era redondo, sus piernas finas y preciosas, su abdomen plano.

A los montos volvió y se sentó de nuevo.

-Perdon por molestar tanto, tenía que ir urgentemente al baño.

-No te preocupes

Me puse a ver la película y tratar de disimular las ganas que tenía de empotrar a la chica que tenía al lado, tenía algo que me encendía demasiado.

Fue mala idea, la película no se en que momento había tomado un tono muy erótico y los protagonistas se estaban destrozando en la cama llenos de pasión.

-Joder...- se me escapó casi gimiendo

Mierda estaba segura de que me había oído.

-Estas bien?- me preguntó preocupada

-Sí, sí, yo es que, nada perdón, la peli que, bueno nada, perdón- dije torpemente avergonzada

-Jajaja ni te preocupes a mí estás escenas siempre me ponen muchísimo también, luego llegó a casa y estoy empapada

El saber que estaba caliente como yo y empapada hizo que yo me empapará aún más de lo que ya estaba

-jajaja me pasa, llego a mi casa enfadada y todo por quedarme con las ganas.

No se por que he dicho eso, he quedado como una pajera dios santo

-Quieres que hagamos un trato? Es un poco raro igual, no me juzgues

-Oh no claro dime, no te preocupes no te voy a juzgar

-Bueno, estamos solo las dos en el cine y las dos estamos calientes, si a ti no te importa y a mí no me importa podemos masturbarnos mientras vemos la película y así ninguna se queda con las ganas y la disfrutamos más

Dios santo no sabía quién era ese chica pero bendita sea la vida que mee daba una experiencia así al lado de una chica como esa.

-Me parece un buen trato

Y sin más preámbulos me metí la mano en el pantalón mirando a la película y comencé a estimular mi clítoris.

La película estaba dejando de excitarme pero sabía que había algo que me pondría mucho más que cualquier película y eso era ver a la chica de al lado tocarse.

Giré mi cabeza y miré su mano, se había bajado los pantalones y las bragas y podía ver perfectamente sus manos acariciando su clítoris y su coño mojando el asiento. Esa imagen me empapó he hizo que mis movimientos se acelerarán siguiendo su acelerado ritmo, cada vez estaba más cerca y a la vez cada vez tenía más ganas de lanzarme a comer su coño.

Mire su cara, era preciosa, verla acelerada y caliente me ponía aún más. Quería follarmela deseaba hacerlo.

La joven se dio cuánta de que la miraba y me miró.

Me sentí avergonzada pero no podía parar de tocarme y mirarla.

No pareció importarla, de hecho note que le gustaba.

Cogió su mano libre y se acercó a mis pechos.

-Quieres que te ayude?

Dijo con una voz quebrada y llena de lujuria

-Quiero follarte y que me folles

Dije sin poder evitarlo

-Pues ven y hazme lo que quieras.

Sin esperar ni un segundo más me levanté de mi sitio y me lancé a sus labios. Nos devoramos con ansia y pasión.

Deje su boca y me dirigí al sitio que llevaba minutos queriendo probar. Me puse de rodillas en el suelo, abrí sus piernas y lamí su coño, estaba empapado de sus flujos, ni quería dejar ni una sola gota de ese néctar.

Ella comenzó a gemir, eso en excitaba demasiado y me daba ánimos para seguir a mayor velocidad quería que se corriera en mi boca. Lamí con mar fuerza y cada vez más rápido. Ella se restregaba en mi cara y cabalgaba sobre mi lengua acercando su coño a mí para que no parará, me cogía del pelo y me atraía a ella. Pronto las paredes de su coño se apretaron y sus flujos recorrieron mi boca, se había corrido.

Me levanto de suelo y me hizo sentarme en sus piernas, me beso apasionadamente y sus dedos sin preaviso se metieron en mi empapado coño, entraban y salían solos de lo lubricada que estaba, me daba estocadas y era ahora mi turno de cabalgar sobre ellos, me movía y me restregaba en bus piernas, se notaba que tenía experiencia con chicas por qué sabía perfectamente donde tocar y como meterlos, me daba toques en el punto g, estaba a punto de correrme necesitaba que fuera agresiva que fuera muy rápido, que metiera y sacará con fuerza en cada estacada, y como si pudiera leer mi mente eso hizo, me follo con ganas y poder. No aguante mucho tiempo antes de correrme y dejar todas sus piernas chorreando.

Justo las luces se encendieron, me levanté de sus piernas, me coloque bien mi falda y míos bragas y ella sus pantalones y bragas.

-Te veo el martes que viene?

-Por supuesto

La di un beso co lengua, luego baje a su cuello lamiéndolo y terminé dándoles un apretón en el culo.

Luego me fui a casa y tiré esas bragas por qué de lo mojadas que estaban sabía que ya no servirían.

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Hola chic@s estaba pensando en crear una historia basada en uno de los capítulos, sería más como una novela y no capítulos sueltos, evidentemente también tendría escenas erótica pero no sería solo eso. Decidme si os parece una buena idea y si os gustaría leerla. Espero que os esté gustando y muchas gracias por todo el apoyo que le dais. ❤️

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