THE MVP ; Miky Woodz

OO4.

—El OG.—la voz de Rauw nos sorprendió a ambos, pensaba que todavía seguía por España.—Hola baby.

—¿Y cuando e' que fuiste papá?.—el tipo hizo el ademán de reírse pero jamás lo escuché hacerlo, su expresión se cambió al notar el tono de seriedad con el que Miky se dirigió a él.

—Así le digo a Sara.

—Le decías.—le corrigió.

—Este...Con todo el respeto que te tengo de compañero de profesión a compañero de profesión, los asuntos que sean de nosotros así quedan, tu no tienes que andar comentando ni interviniendo, ¿entendiste?

Se rascó la barba mientras lo observaba fijamente, el tipo no habló demasiado, me besó con suavidad-cosa que me sorprendió porque me hizo saber que no era por joder a Rauw principalmente-me entregó mi cel ya que lo llevaba en su chaqueta y se perdió por el pasillo del estudio.

—¿Estuviste armándome todo un show y mientras te acostabas con Miky?.—no le respondí.—Hipócrita.

—¿Yo?, pero yo no era quien no asistía a tus eventos "porque eso no era pa mi" y después acompañaba a Rosalía a los suyos o si?

—¿Chingaste con él?

—No, Rauw.

—¡No me mientas!

—La cabeza me duele, deja de chillar.—no entendía ese interés repentino.—No chingué, hicimos el amor...Okay tal vez a partir del tercero si fue más...—suspiró tan fuerte que interrumpí mi explicación.

—¡Sara, carajo!

—¿No te has tirado a Rosalía?, mírame a los ojos y dímelo.

—Yo...Me arrepentí y por eso venía a decirte.

—¿Quieres arreglar esto, después que te metiste con ella?

—Tu te metiste con Miky.

—No soy la que quiere regresar.

—Baby, dale, el público nos quiere juntos y sé que todavía me amas, Sara.

—Sí, lo hago pero no quita que haya abierto los ojos, merezco mucho más de lo que me diste y lo que me podrás dar, llevo demasiado conformándome con poco y me cansé.

—¿Miky Woodz va a darte más?—comenzó a reírse.—Suerte.

—Te deseo lo mejor , Rauw.

—Volverás a mi, tu va' a ve'.

—Yo no lo creo pero la vida da muchas vueltas...O eso dicen.—sentí como envolvían mi mano, la presencia de Miky enseguida se notó y supe que ya volvió de su paseo y que la conversación había durado lo suficiente para poder habernos dicho todo.

—¿No pudiste dejar enfriar el cuerpo?

—¿Y es que es una presa, un conejito que acabaste de cazar?.—sonreí.—No te moriste so no te debemos luto, ustedes no andan y estamos grandes pa hacer lo que se nos pegue la gana y si te mordiste porque ya no podrán regresar pues viene y me cuenta el problema que yo le voy a explicar porqué conmigo si le va a ir cabrón.

—Ni siquiera le gustan los niños y tú tienes uno.

—No.—lo señaló.—De mi hijo no hables.—tiré un poco de él cuando noté su actitud más agresiva, estaba dispuesto a echarse sobre él.

—Sara va a volver a mi.

—¿Serio, tú eres adivino ahora?

—Sé lo que le gusta.

—Lo sabes...—se encogió de hombros.—¿Qué se siente saber que le gusto yo?—la cara de Rauw estaba para enmarcarla.

—En otro momento hablamos, Sara.

—Prefiero que no.—respondí inmediatamente.—Papi, vámonos ya.—Miky asintió, caminamos con las manos enlazadas por el largo pasillo hasta llegar al exterior, allí se alejó para abrirme la puerta y tras eso, se subió al coche.

—¿Te importa acompañarme a un juego?, soy invitado y ya les confirmé.

—Claro,vamos.

(...)

Desde que llegó la gente se puso como loca, me gustaba la idea de ver un juego de básquet con alguien a quien le apasionaba tanto como a Woodz, había visto muchas veces su participación en el juego de estrellas que solían hacer en Puerto Rico y en otros partidos a los que suele asistir también.

Nos pidieron fotos, autógrafos y las cámaras realmente estuvieron pegadas a nosotros, algo que me sorprendió fue la tranquilidad del tipo, al ser figura pública escuché par de historias de tipos que ni la hora te daban porque la prensa después iba a hablar. No era el caso de Miky, desde que llegamos se dejó llevar de lo que quería hacer en cada momento, parte del juego lo pasamos agarrados de la mano, de vez en cuando besaba mi mejilla porque era yo quien no quería mostrar de más pero igual terminó robándome algún beso.

—Ese de allá es bueno.—comenté agarrando la botella de agua, Miky se fijó en el tipo mientras me arrebataba la botella para así abrirla, me la devolvió y bebí, me moría de sed.—Gracias.

—Hace unos buenos bloqueos pero la clave está en el doce.

—¿Y como sabes?

—Por eso.—me quedé boquiabierto cuando el tipo encestó un tiro desde bien lejos.

—¿Tú haces eso también?

—Y mejor.—me miró.—El otro equipo está jodio, estuvieron frontiando en redes pues les toca bregar ahora con la humillación.—apoyé mi cabeza sobre su hombro.—¿Estás cansada o aburrida?

—Ninguna, solo quería apoyarme.

—¿Segura?

—Sí, papi.

—Okay, igual ya terminaron.—señaló el marcador.

Me puse la cazadora de cuero que traje antes de levantarme, comencé a caminar hacia la salida sintiendo los pasos de Woodz detrás de mi, cuando llegamos al aparcamiento me quedé esperando a que nos trajeran el carro.

—¿Vas pa' tu casa ahora?

—Sí, mañana tengo que grabar un vídeo, quiero descansar.

—Vamos pa' la mia.

—Pero yo no dij..

—Yo no te pregunté, te dije que vamos pa la mía.—rodé los ojos.—Quiero dormir contigo.

—¿Velda'?.—asintió.—Ta' bien pero vamos a ver el Rey león.

—Esa película de memoria me la sé por culpa de Meek.

—¿Él está con su mamá?

—Sí.

—¿Hasta cuando?

—Cuando quiera él.

—¿Tienes buena relación con Fihama?

—Es un trato cordial por el nene.

—¿Desde que se dejaron no se volvieron a acostar?

—Desde que nos dejamos no estuve con nadie, ni siquiera con ella.

—¿Por qué?

—Ninguna llamó mi atención.

—¿Y yo si?

—Yo te vi y sentí algo, como que debías llevar mi apellido.—me reí.

—Que fuerte sonó eso.

—Solo disfruta, Sarita, el resto llegará solo.—vi el carro de Miky, por fin volveríamos a casa.

••••

Aquí el de hoy❤️