A TRAVÉS DEL ESPEJO 1 (COMPLETA) ✔

CAPÍTULO 24 (EPÍLOGO)

Yumei sacó otra caja de su armario y empezó a llenarla de algunos objetos personales, se levantó del suelo y se dirigió hacia su mesita de noche, se sentó en la cama mientras cogía el marco de fotos.

Ella sonrió mientras observaba la foto; en ella estaba su padre y ella. Se hicieron esa foto cuando tenia 8 y había salido de su primer día de patinaje sobre hielo.

Su sonrisa aumentó y sus ojos brillaron de alegría al recordar el día.

Se volvió a levantar y se dirigió hacia la caja, depositó el marco con cuidado junto a las demás cosas y suspiró mientras cerraba los ojos y cerraba la caja.

Hace 3 meses que ya no tenia las zapatillas, lo único que supo de ellas fue que desaparecieron de sus pies cuando escuchó a alguien pedir un deseo después de que ella rompiera todos los otros concedidos.

Alguien abrió la puerta de su cuarto y entró dirigiéndose hacia la cama y sentándose.

Natasha- ¿Como vas hermanita?

Ella se giró cuando se sobresaltó un poco al oír su voz.

Yumei- Ya recogí lo último, en total son tres cajas.

Natasha- Entonces, ¿estás lista para irte?

Yumei- Un poco.

Natasha- ¿Pero?

Yumei- Simplemente no quiero dejar sola a mama.

Natasha- Pero no es como si te fueras del pueblo.

Yumei- No, pero ya no vendré aquí hasta que sea fin de semana y aún así no podré venir todos los días.

Natasha- Pero mama no estará sola, Peter viene muchas veces aquí y yo prácticamente vivo aquí cuando no me quedo con Bobbi.

Yumei- Ya, solo la voy a echar de menos.

Natasha- Lo se, yo también te voy a echar mucho de menos hermanita.

Ella se abalanzó hacia Yumei y le dio un fuerte abrazo tirándola a la cama. Melinda entro en el cuarto y vio a sus dos hijas tiradas en la cama aún abrazándose.

May- Oye chicas, ¿que estáis haciendo?

Yumei- Natasha me atrapó en su abrazo de oso.

Natasha- Es que mi hermana pequeña se va de casa y no la podré ver hasta verano.

Yumei se soltó del agarre de su hermana y se incorporó mirándola.

Yumei- ¿Que quieres decir Natasha? Nos podremos ver en fines de semana.

Ella también se incorporó y bajó la cabeza, sus manos agarraron su pantalon con fuerza mientras intentaba formular las palabras.

Natasha- Verás hermanita, me han destinado a Rusia.

Yumei- Pero, ¿por que?

Natasha- Bobbi se va para hacer un trabajo de parte de su padre, no se de que trata pero se que vamos a tardar meses en volver.

May- ¿Cuando pensabas decirlo?

Ella se acarició la nuca.

Natasha- ¿Hoy?

Su madre solo negó ante su respuesta.

Yumei- Te voy a echar mucho de menos.

Natasha- Y yo también hermanita.

La volvió a abrazar.

********

Ella se detuvo en la puerta de la Universidad, la gente entraba y salia del edificio que tenia en frente suya, Yumei suspiró suavemente antes de coger sus tres cajas y dirigirse hacia dentro del edificio.

Ella buscó entre todas las puertas el número de su cuarto, miró el papel que le dieron al entrar y vio el número "126", volvió a guardar el papel en su bolsillo y siguió caminando.

Al girar una esquina se chocó contra alguien que venía corriendo sin mirar hacia delante. Ella cayó al suelo y sus cajas también cayeron al suelo esparciendo todo lo que tenia dentro.

Yumei- Auch, que daño.

Carlos- Lo siento, no estaba mirando.

Yumei- Todos tenemos accidentes así, ¿no?

Ella miró hacia arriba y vio toda su ropa y sus objetos personales tirados por todas partes.

Yumei- Oh, mis cosas.

Se acercó a sus sudaderas que estaban ahora mezcladas con sus otros objetos para devolverlos a las cajas.

Carlos- Deja que te ayude.

Se volvió a agachar para ayudarla, se acercó a donde había un marco de fotos y fue a cogerla pero se chocó contra la cabeza de la chica.

Yumei- Auch.

Se puso de rodillas mientras se frotaba la cabeza por el golpe.

Carlos- Lo siento de nuevo.

Yumei- No pasa nada.

Después de recoger todo y volver a ponerlo en las cajas, Carlos le ayudó con las cajas.

Carlos- Eres nueva, ¿cuál es el número de tu habitación?

Yumei- 126.

Carlos- Dejame enseñarte donde está.

Yumei- Esta bien, gracias.

Carlos- Por cierto, soy Carlos.

Yumei- Yo soy Yumei, Yumei Li.

Carlos- Pues encantado Yumei.

********

Los dos se pararon en frente de una puerta con el número correcto que tenía Yumei para su cuarto.

Abrieron la puerta y entraron en la habitación, Yumei pudo ver que las otras dos compañeras que tenia de cuarto ya se habían instalado.

Carlos- Bueno, aquí es.

El dejó las cajas encima de la cama vacía.

Carlos- Si necesitas ayuda solo pídela. Nos vemos por allí.

Ella sonrió mientras lo veía salir del cuarto y en el segundo siguiente entró otra persona en la habitación.

Yumei dejó el marco de fotos en su mesita de noche nueva y miró hacia la puerta.

Yumei- Hola, yo soy Yumei y...

Miró hacia la persona que estaba allí plantada que no había visto desde hace tres meses.

Eleanor- Hola de nuevo Yumei

Fin... ¿O quizás no?

Chicos, este es el final de esta maravillosa historia pero atentos, tengo una noticia fantástica. Voy a hacer una segunda parte donde se descubrirá por fin los grandes misterios que ocultaban las zapatillas.

Así que espero que disfrutes de la segunda parte. Hasta otra amigos.