<UN AMOR NO PLANEADO> ♡YIZHAN♡ 🍒En Edición🍒

♡♡ EXTRA 5 ♡♡

Zhan salía del hospital era su día libre al fin. Subió a su auto y se dispuso a conducir, no sin antes pasar por el súper mercado a comprar algunos víveres, tomo el carrito y comenzó a caminar por los pasillos, pasando por el lugar donde habían cientos de golosinas y comenzó a poner de todo un poco y vaya que llamaba la atención.

Un hombre de buen físico, de rostro angelical y una hermosa sonrisa que le daba a cualquiera que lo saludara, obvio llamaría la atención de muchas mujeres solteronas, pero su rostro cambiaba al ver el anillo en uno de sus dedos, haciendo saber que ese hombre ya no estaba disponible.

―Su esposa debe ser muy afortunada― escucho decir a una chica que iba pasando

―Si supieran que yo soy la esposa― dijo bajito y sonrió

Sus compras fueron interrumpidas por una llamada y su sonrisa fue más grande al ver de quien se trataba.

―Hola cariño

―Hola amor ¿ya vienes de camino?

―sí, solo estoy comprando unas cosas― vio todos los dulces en el carrito

―¿Dulces verdad?

―Si― susurro

―Bebé, te pondrás muy hiperactivo si comes muchos dulces― se quedó un momento en silencio― bueno sabes que come todos los dulces que quieras, en la noche te quitare toda esa energía amor

―Desvergonzado― se sonroja― ya voy a la caja a pagar llego en cinco cariño

―Mejor en cuatro― sonríe al escuchar los regaños de Zhan― bien ya no hago más bromas pero así te voy a poner en menos de una hora― volvió a reír

―Wang Yibo, te dejare en abstinencia― hizo un puchero

―Bien lo siento, acabo de llegar a casa y el peque esta con nuestros padres, yo solo decía

―Déjate de bromas voy en camino

―Bien, nos vemos amor, cuídate

―Bueno adiós― y colgó

Pago todo y se dirigió otra vez a su auto, las cosas habían cambiado en esos cinco años, él se había convertido en director del hospital donde había trabajado, Yibo era patrocinado por muchas marcas reconocidas dándole más trabajo y Jin Ling estaba feliz con su familia, sus padres como su suegra se hicieron vecinos y pasaban casi todo el tiempo inventando cualquier cosa.

Todo había mejorado y para bien. Habían comprado una casa para su familia, pues vivir en un departamento comenzó a asfixiarlos por muy poco espacio y más con un pequeño corriendo de aquí para allá, ahora todo estaba bien y más en su matrimonio, había peleas claro, como todo matrimonio pero nado que no se pueda solucionar.

Dejo su auto en el garaje y salió junto con las bolsas de las compras que había hecho, abrió la puerta y se dirigió a la cocina para acomodar todo y dejarlo fuera del alcance de su pequeño. De la nada sintió como unos brazos lo rodeaban de la cintura y sentir una húmeda legua pasar por su cuello, sin dudas su esposo necesitaba de su atención.

―Bienvenido a casa cariño― lo siguió besando

―Este un poco travieso― soltó un pequeño gemido al sentir una mordida

―Te extrañe estos dos días, no he podido besarte, tocarte, ni hacerte el amor. No crees que me has hecho esperar suficiente― hizo un puchero

―Dijiste hasta en la noche― giro su rostro y le dio un pequeño beso en los labios.

―Y tú que me crees, obviamente no iba a soportar hasta en la noche con semejante esposo que tengo― bajo sus manos hasta la entrepierna del pelinegro― vamos amor yo sé que también quieres.