Capítulo 4: Compatible

100 14 7
                                    


Christopher estaba en la puerta cuando Felix llegó, lamentablemente para el rubio su hermano llegó primero.

— No quiero excusas —dijo el mayor cruzado de.

— Pues... hermano —el rubio se mordió los labios—, me encontré con un amigo y ya sabes.

— Feliz, ¿te fuiste a tener sexo? —el mayor negó con la cabeza—. No uses de nuevo a Seungmin para tapar esas cosas.

— Chris —el rubio se acercó y palmeó el hombro de su hermano—, ¿Cuándo le pedirás a mi amigo una cita?

— Estás loco —el mayor se alejó—, no me gusta tu amigo.

— Si claro, como a mí no me gusta Hyunjin.

— Deja eso.

— Chris, ¿hay algo que necesites para regalártelo? —el mayor miro sin entender a su hermano.

— ¿de dónde sacaras dinero?

— Pues, alguien me debía dinero y quiero hacerte un regalo —el menor sonrió y el mayor se acercó para tomarlo de las muñecas.

— ¿te estás prostituyendo? —preguntó en un tonó alto.

— Claro que no...

— ¿Quién se está prostituyendo? —la madre de ambos entró a la cocina.

— Nadie mamá —el menor miró feo a su hermano y se acercó a su madre—. ¿Necesitas que te ayude en algo?

— No, Felix —la mujer suspiró y sonrió a su hijo—. ¿Cómo te fue en el concierto?

— Fue genial mamá, me llevaron detrás del escenario y conocí en persona a Hyunjin.

— Oh... mi hijo lo paso muy bien —la mujer acarició la mejilla del rubio—. Me alegro que tengas distracción —una tos la interrumpió.

— Mamá, ve a la cama —el mayor se acercó y la ayudó a volver a la habitación.

— Mamá, ¿quieres alguna cosa que necesites con urgencia? —preguntó el rubio a la mujer.

— Una cama, pero no gastes lo poco que tienes en ello.

— Te amo mamá —el rubio salió de la habitación corriendo.

— Sé lo que estás pensando Chris —dijo la mujer acariciando a su hijo mayor—, tu hermano es un buen chico, no haría esas cosas.

— Lo sé, pero me preocupa —la mujer se recostó de nuevo—. Descansa madre.

Los días fueron pasando, Felix hizo dos compras grandes con el dinero y el resto lo guardo para juntar para la operación de su madre. El primer regalo llegó tres días después y era una moto scooter para su hermano, el cual lo regaño e insulto hasta que su madre interfirió y no le quedó más remedio que aceptarla. El segundo fue la cama de su madre, la cual le ayudo mucho ya que la mayor parte del tiempo estaba acostada.

Felix siguió trabajando de vez en cuando y cuidando a su madre, pero la salud de ella era cada vez peor y no aparecía ningún donante, pero aunque lo hubiera aun no tenían el dinero reunido para la operación.

Un mes después un menaje extraño llegó a su celular.

*ando en el país de vacaciones, te espero en la dirección que te envié en media hora*

— Pero... —el rubio miró una y otra vez el número, leyó el mensaje una y otra vez—. Mierda no puede ser, es imposible que sea.

Le aviso a su hermano que saldría, tomó el autobús, por suerte no era lejos el lugar. Llegó 25 minutos después a la recepción de un hotel.

CONTRATOWhere stories live. Discover now