El Rey De Negro #1 || hananene/Amane

veinte

Yashiro quedó impactada por el gran parecido que compartía con su hermano.

Totalmente idénticos, aunque mostraba ser una persona más expresiva e intensa que su hermano mayor.

Mucho se rumoreaba sobre el, de la familia hasta que ahora todos esos rumores están siendo desmentidos por el actual príncipe de negro.

"Se dice que lo enviaron a una finca especializada por cuatro años"dijo aoi.

"Si, también lo escuché antes"respondió nene.

Amane se paró alado de yashiro, acercándose un poco a ella.

"¿Lo ves?"

Ella se giró para verlo.

"Tenías razón, se parecen mucho..."

"Si"

Amane saco a yashiro de la fiesta y la llevo afuera donde nadie estaba.

"Me iré contigo por unos días"

"Claro, no hay problema, pero..."

"Estamos hablando de tu hermano, ¿Aún que sea le as dirijido la palabra?"

"Le temo a el y a sus capacidades"

Ambos caminaron en silencio, dieron atrás del palacio, donde amane estaba besando sin parar a nene, llevando sus besos a unos profundos llenos de pasión.

"¿Que hacen aquí?"escucharon ambos atrás de ellos.

Giraron solamente para ver al hermano gemelo de amane.

Yashiro estaba con la espalda en una pared y amane frente a ella.

"Oh, tranquilos, no diré nada"

El se retiró dejándolos solos otra vez, para este punto empezo a incomodar a amane.

"No seas frío con el"

"Es tu hermano y en algún lado de su corazón, aún que sea guarda un poco de amor por ti"

"No está mal desconfiar"

Ambos siguieron con lo que estaban.

La fiesta se dió por terminada al día siguiente, amane pasaria algunos días con yashiro, pues no tendría que soportar a la princesa que siempre está hay para reclamarle.

Pero la princesa se encontró con el hermano de amane, ambos se encontraron negociando.

"Se que tiene algo con la reina de rojo"

"Si te sirve de ayuda, dehecho si, los ví atrás del palacio, estaban muy juntos ya sabes ¿No?"

"¿Que tengo que hacer para que te deshagas de ella?"suplico.

"Fácil, tienes que darme todas las llaves de cada puerta de este lugar"

Así lo pidió, y así lo hizo la princesa.

"Espera"le negó las llaves alejándose un poco.

"¿Cómo puedo confiar en tu palabra?"

"No lo sé, no soy tu, princesa"

Ella dudo si dárselas o no, lo termino haciendo de todos modos.

"Bien, ahora espera, en dos meses, ese será mi regalo de bodas para ti"

"Está bien... Lo que sea por mi futuro"