Stay with me [Mitake Week 2023] [Terminada.]

Creep

UA. Inicio del manga.
Omegavers.
Cant P: 2091.

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La vida de Takemichi Hanagaki, siempre se basó en estar trabajando casi 18 horas del día, los siete días de la semana, no tenía horas de descanso, y tampoco comía de manera equilibrada, viviendo en un departamento de paredes delgadas y sobre todo pasando necesidades; sus pocos amigos por no decir solo 2, se preocupaban por él, pero siempre solía darles la misma respuesta.

—No se preocupen, no me pasará nada.

Por eso la preocupación caía en ellos, no solo por el estado físico y psicológico del omega. Sino por lo que estaba pasando últimamente en las calles.

La mafia criminal más poderosa, la Tokyo Manji, estaba provocando estragos, y atacando a los omegas que caminaban de regreso a sus hogares; por ese motivo Seishu y Matsuno estaban tan agobiados, pero están hablando del chico de cabello negro y ojos azules. El cual no contestaba su teléfono y los tenían con el alma en un hilo.

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En la tienda de dvd's Hanagaki estaba cargando su móvil, ya que no tenía batería y quería avisarles a sus amigos que tendría que quedarse en la tienda reemplazando a un compañero, pero como el Omega siempre goza de mala suerte, nada puede salir bien de algo que no planeó.

Los disparos fueron el indicio de que algo no saldría bien, más cuando aquellos atravesaron los vidrios de la tienda, Hanagaki se ocultó en el mostrador totalmente asustado, mientras que algunos de los clientes que estaban en el lugar se lanzaron al suelo tapando su cabeza.

El Omega trataba de no estar más nervioso por la situación, pero el ambiente no se lo permitía, escuchaba como unos hombres hablaban.

—Tiene un tatuaje de dragón en su cuello y a pesar de ser un alfa no es alto.

menciona uno de ellos.

Takemichi con el poco valor que tenía, se asomo un poco para mirarlos, hombres con trajes negros y lentes oscuros a pesar que ya era de noche.

—Maldito enano escurridizo.

Aquello hizo que el Omega volviera a su lugar y tratara de relajarse; escucho como el teléfono de uno de los hombres sonó y rogó para que fuera algo que los sacará del lugar.

Las bocinas y sirenas de los vehículos de emergencia se escucharon y aquellos hombres salieron del lugar corriendo.

Los clientes que estaban en el suelo comenzaron a hablar entre ellos y Takemichi salió de detrás del mostrador.

—¿Es-estan... to-todos bien?

Preguntó el Omega, tratando de no llorar a lo cual recibió un asentimiento por parte de los 3 clientes que estaban.

La policía, llegó dónde Takemichi, e interrogó para saber que había pasado, lo mismo hicieron con los clientes.
El oficial le recomendó cerrar el lugar y que fuera hacia su casa.

Takemichi, le dijo que lo haría y en encuentro se quedó solo cerró la tienda, iba a llamar a su jefa pero su teléfono estaba roto producto de un disparo que le llegó.
El Omega miraba por el agujero que tenía el aparato.