DOS PARA UNA© [Completa✔️]

▼CAPÍTULO 55 (PARTE II)▼

Cambio frases chingonas y reflexivas, por votos y comentarios.
No sean tímidos y denme amor.

Recomendación Musical
Pensando en ti - Canserbero

''Quizás me comprendieras, a menos que creyeras''
''Que no tengo defectos o soy el nuevo Dios''

.

.

MACA

Del helicóptero cae unas escaleras y un hombre con uniforme igual que el resto se desliza hasta el piso. La placa de capitán es lo único que brilla sobre su pecho.

Hace una seña con las manos y la enorme ave metálica se eleva hasta quedar lo suficientemente cerca para ser respaldo, pero no tanto como para molestar con su maldito sonido.

Ese hombre vuelve a hacer otra seña y cinco de sus agentes llegan a su lado, caminando detrás de él.

Al quitarse el casco, parpadeo sorprendida, Juan Carlos es alto, demasiado alto y con abundante barba, el cabello oscuro le roza la mandíbula... tiene un parche en un ojo con la cicatriz perdiéndose en su barba.

El maldito casi que parece un verdadero pirata si no fuera tan atractivo.

—¡Hola, papi! —saluda Alexis cruzándose de brazos y abriendo las piernas, luce relajado—. ¡¿Qué es la que, con el chamo que se vendió a los gringos?!

—Yo soy tan yanki como tú lo eres, Alexis Ryusaki —se burla Juan Carlos y su forma de hablar es muy diferente al de Rosmery, este acento se siente más rustico, como más callejero—. Esto no es nuevo para nosotros, ¿verdad? —Se encoge de hombros—. Ya sabes lo que debes hacer, mamarracho.

Alexis mira hacia atrás y le hace una seña a Rabipelado para que bajaran las armas, le hacen caso, aunque están nerviosos.

—Bien, lo conseguiste, cabrón —accede estirando las manos hacia adelante—. Me tienes, ya está.

Juan Carlos se detiene de golpe, se saca una pistola de un lado de la pierna y apunta a Alexis, se mantiene en posición de ataque mientras observa todo con su ojo bueno.

Alexis suelta una risita malvada.

—¿Y piensas qué te voy a creer sin más? —cuestiona Juan Carlos, reparando cada persona a su alrededor—. Me la haces una vez, dos jamás, no soy gafo, Alexis.

—Mera woo, pensé que ya me habías perdonado por eso.

—Primero me vuelvo chavista, chinchón de piso.