- Cada protector tiene su propia percepción de lo que es defender la isla, por eso cada uno de nosotros tiene una preferencia por una forma u otra...
- ¿A qué te refieres con percepción?
- Depende de la situación si nos transformamos en varones o en mujeres.- William tomó aire para la siguiente pregunta.- Para distraer a los hombres nos transformamos en mujeres.- William cerró la boca e hizo una mueca con el labio, casi una ofensa y aquello dibujó una sonrisa en los labios del contrario.
- No iba a preguntar eso...
- ¿Oh...? ¿Y qué ibas a preguntar?- alzó las dos cejas esperando su respuesta.
William se quedó en silencio y desvió sus ojos lentamente.
- Sigo esperando...- murmuró con un ronroneo.
- Ya no tengo más preguntas.- escupió apartando la cabeza hacia el otro lado un poco violento, pues estaba notando sus mejillas enrojecer por la vergüenza.
- A ver si es verdad...- sonrió satisfactoriamente.
- Bueno... Solo una...- lo escuchó soltar una carcajada al aire después de hacer un intento por contener la risa.- ¿No puedo volver con los humanos, no?- la risa se detuvo de repente después de haber estado ahogando las carcajadas en la tela de aquel kimono abierto por el pecho y todo se quedó en un silencio súbito.
- ¿Por qué me preguntas eso?
- Asumí que al tener la herencia de ese tal Guillermo, tendría que quedarme en su sustitución... Y si vuelvo con los humanos, seguirán volviendo a intentar buscar el fruto de la vida eterna... Porque seguramente no me harán caso si les explico todo lo que me habéis contado... Bueno... Lo que me has contado...- corrigió.
- Oh... Contaba con que les asustaría saber que están atrapados aquí y si los encontramos solo les espera la muerte y que abandonarían por completo sus intentos de robar el fruto...
- Aun así estamos aquí atrapados hasta que el barco pase a recogernos... Aún faltan dos semanas...
- Menudo problema...- rodó los ojos.- Si prometen no indagar en nuestras regiones de protección, no habrá problemas... Y puede que hagamos excepciones con lo de intentar matar a todo ser viviente mortal ajeno a la isla que veamos.
- Eventualmente la comida se nos acabará y nada aquí es comestible.
- Para ti sí.
- Pero no para los demás...- se encogió de hombros como si no pudiera hacer nada para solucionarlo, y ciertamente no podía hacer nada.- Eso es lo que me tiene preocupado...
...
Era una noche nublada y fría que hacía temblar sus cuerpos aún debajo de las mantas y las capas. Gilbert cubría su cuerpo con la capa de su primo, su mirada se perdía en las sinuosas curvas de la hoguera, intentando calentar sus temblorosas manos, era el que más cerca de las llamas estaba... Los dos hermanos estaban bastante cercanos, compartiendo una manta. A pesar de encontrarse en una cueva refugiándose de la humedad de la noche, la sensación heladora del clima los seguía congelando hasta los huesos. La cena había sido breve e insuficiente, Gilbert apenas tenía hambre, estaba devastado y con el estómago cerrado, sobre todo después de que Álex y Keenan le explicaran que la mujer de cabellos azules se lo había llevado.
Los tres habían asumido que William había fallecido en manos de aquella mujer. Los dos hermanos no estaban tan afectados sentimentalmente por la pérdida, simplemente se mantenían en silencio para que Gilbert pudiera tener su momento de lamentos internos apretando la tela de la capa negra y roja de William y tenía su katana a un lado. Ni Keenan ni Álex le insistieron en que comiera más.
Varios pasos los pusieron alerta y los dos hermanos apretaron el mango de sus armas, pero los soltaron de inmediato y abrieron los ojos en shock al distinguir la figura.
William apareció ante ellos como un espejismo, incluso se estremecieron al verlo, porque no sabían si era un fantasma o realmente estaba presente ante ellos. Se acercó un par de pasos más, adentrándose en la cueva.
- Tenemos un problema...- susurró su voz algo rasposa mientras llevaba una fruta mordida en su mano.
- Sí. Estás vivo.- inquirió el hermano menor con ojos heterocromáticos, la mirada sarcástica del azabache con puntas rojas se acentuó considerablemente.- Y tu pelo...
- ¿Qué le ha pasado a tú pelo?- William movió la cabeza para apartar algunos mechones de su rostro.
- Ese es el problema...- respondió.- Soy uno de ellos, aparentemente...
Tres pares de ojos se lo quedaron mirando con los ojos muy abiertos. William se tomó unos segundos para sentarse al lado de su primo. En ese momento notaron que llevaba varios frutos con él, y cuando el castaño acercó su mano, un suave golpe en su mano la hizo apartarla.
- Son tóxicos...- murmuró mordiendo la fruta.
- ¿...?- alzó una ceja lentamente.
- Para ti. No para mí...- aclaró al ver la mirada de los tres.- ¿Me pueden dejar explicar las cosas? Dejad de mirarme así.
- ¡Pues explícalas!- exclamó Álex.- ¿Cómo es posible que estés vivo? Esa tía te llevó. Deberías estar muerto.
William asintió con la cabeza lentamente, carraspeó.
- La isla tiene siete protectores. Actualmente solo son cinco...- los dos hermanos prestaron atención inmediatamente al escuchar aquello, su primo encarnó las cejas.- Han existido dos generaciones de protecciones... Actualmente solo existe la segunda, porque aparentemente uno de mis ancestros era el último protector de la primera generación que quedaba con vida. Fue expulsado por traidor y de alguna forma llegó al continente y se integró en nuestra familia, consiguió transmitir sus genes, aunque ni ellos saben cómo, porque son estériles, y soy su descendencia. Lo cual era un gen dormido, o algo así, hasta que llegué a la isla y esa parte de mí se despertó...- hubo un breve silencio.
- Debe ser por la línea de tu padre, porque los Atxa no tenemos descendencia sospechosa.- murmuró Gilbert.
- Sí. Es justamente por la descendencia de mi padre. Y no me extrañaría nada que ese protector literalmente fuera él, que no tenía un origen muy claro, y pereció antes de que pudiera saber algo sobre él.
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Por fin le puedo decir protectores y no los nativos de la isla XDDD
Y por fin le puedo decir "ambrosía" al alimento o "fruto eterno" al fruto que da la inmortalidad xD
Aquí las opiniones --------------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1057 Palabras]
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56.- El Oasis de la Vida Eterna (crossover Jigokuraku)
FantasyEran condenados a muerte. Tampoco había nadie que se preocupara por ellos si tan solo eran un montón de criminales. De todas maneras iban a ser ejecutados si no cumplían con su cometido, lo cual tal vez les daría una carta de indemnización para todo...