Nymphaea || Gyutaro y Daki

Kontraŭdiro

-Tienes que terminar la maldita escuela- dio un golpe en la mesa
-Estoy harta de ir todos los días a aguantar a tantos idiotas por cosas que no entiendo- grito más fuerte con ambos brazos sobre la mesa
-Eso no importa mientras termines se asegurar tu futuro, entiende-
-Aahg ¡Dije que no quiero y punto!- rodeo ignorando al chico y azotando la puerta por la que salió
-Vuele aquí- se levantó- ¡Ume!- grito a las escaleras sólo escuchando la puerta de arriba azotarse

Se había vuelto una discusión recurrente, ella quería abandonar la escuela y a él le tocaba evitarlo porque si bien el dinero que el ganaba les funciona para vivir sabía que si ella terminaba le podía dar una mejor vida en el futuro entonces debía mantenerse firme aunque con solo escuchar sus reproches quería sacarla de ese lugar, no soportaba en lo más mínimo que alguien se atreviera siquiera a decirle algo malo, bastantes peleas había tenido contra los descerebrados que se atrevieron.

Cuando subió las escaleras después de arreglar todo abajo se hizo a la idea de que la chica no querría dormir con el después de semejante discusion así que con las luces apagadas busco una cobija y tomo su almohada, con el sofá bastaría para el.

-¿A donde vas?- la voz de la chica lo detuvo
Se giro a verla-A dormir abajo-
-Ah bueno, vete entonces- dijo indignada

Estuvo a punto de perder el control y gritarle pero se contuvo de forma casi inhumana que las venas en su cuello se marcaron por la fuerza que hizo,  lanzo la almohada de nuevo a la cama y se acostó con cuidado.

-Eres un tonto- enfunfurruñando se abrazo a su torso oprimiendo sus mejillas infladas contra el pecho del chico
-Tu eres la tonta- dejo caer sus mano sobre la larga cabellera de la chica palmeando un par de veces antes de dejarla ahi -Mañana comienzas tu segundo año asi que haz lo mejor que puedas-
-lo voy a intentar pero no voy a prometer nada-

Si bien no detestaba la escuela por la falta de amigas por ser hermosa de carácter fiero o amigos porque todos los hombres estaban detras de ella babeando descaradamente y no conseguía entenderse con ninguno, simplemente prefería estar en casa esperando a Gyutaro porque estar con el realmente la hacia sentirse tranquila, ahora llegar a un colegio nuevo le parecía una idea fatal después de que la expulsaran en los dos anteriores.

Miro el tablero donde se asignaban las clases con completo desinterés hasta que encontró su nombre junto al número de la clase rápidamente porque su nombre estaba fuera de lo común después miro el mapa que tenía en las manos no entendíendo nada, nunca habían sido buena con esas cosas.

-Necesitas ayuda, soy del comité de bienvenida y...-
Ume sorprendida miro hacia atrás por lo familiar que le sonaba esa voz- La zor...- se detuvo de lo que iba a decir- la chica de la casa de terror-
-Hola- la saludó- Mi nombre es Hinatsuru-
-Ume- intento relajar su expresión
-Hina ¿Tienes un mapa? Los míos ya se...- miro a la peliblanca -Hey la chica de gritos bonitos- busco a su alrededor sin mucha discreción- ¿No está contigo el malhumorado de tu novio?-
-No es un malhumorado y tampoco es mi novio-
-¿No?- pregunto Hina
-Es mi hermano-
-Oh-

Ume no se perdio ni por un instante cada movimiento facial de la chica.

-Bueno como sea- intervino Uzui- ¿Buscas tu salon, cierto? Vamos te llevare-
-¿Porque?- se puso a la defensiva
-Porque es mi trabajo como miembro de comité- hablo haciendo una seña al brazalete en su brazo- también los llevaré a ellos, bueno grupo en marcha -

No podía evitar mirarlo, el aura que desprendía era la de un líder, desbordante de seguridad, fuerza e hidalguía, cada estudiante nuevo se quedaba en su salón conforme avanzaban reduciendo el grupo.

-Uzui ¿Ya terminaste? La campana está por sonar- la fuerte voz delante de ellos era difícil de ignorar

Un joven de pelo amarillo con ojos grandes irradiaba como el sol una calidez y fortaleza única.