Capítulo I: Susurros en la noche.

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"Tengo que esconder este sentimiento que no puedo controlar

Me dejo llevar por este sentimiento que no puedo controlar

Derramas tu encanto sin decir una palabra

Cada que te miro, me quedo encantado"

—Stray Kids; Sorry, I love you.


No todo el tiempo puede controlar su cuerpo, aunque siendo honesto tampoco era una persona que le interesaba el tema del sexo. ChangBin había dedicado toda su adolescencia a perseguir sus sueños, superando cada reto y a cada idiota que trataba de derribarlo, después de años eternos esas memorias parecían tan lejanas y gracias al destino no era algo por lo que tuviera que preocuparse, ahora solo podía disfrutar al menos por un momento de tiempo.

—¿Por qué siempre estás tratando de besarme? —Se queja el pequeño JeongIn, esta vez un poco más molesto por el gesto de ChangBin.

—Es porque eres muy lindo. —Trato de sonar gracioso, manteniendo el juego que siempre había hecho solo para molestar a sus compañeros.

JeongIn le dedicó una mirada de fastidio y se alejó de él. ChangBin había ido a visitar el departamento de SeungMin, MinHo, Felix y JeongIn, ahora que sus ingresos habían aumentado notoriamente la empresa había decidido darles mejores condiciones de vivienda y por una u otra razón terminaron separándose en dos partes, para suerte de todos aun estaban cerca y así como en este momento podían visitarse los unos con los otros, pero la dinámica había cambiado un poco.

En estos momentos tenían unos días libres, Han había ido a pasar ese rato con sus padres mientras HyunJin y Felix fueron de viaje de camping a las montañas, JeongIn y SeungMin se la pasaban durmiendo y MinHo imitó a Han. ChangBin estaba aburrido y no tenía cómo entretenerse, pensó que ejercitarse un poco sería entretenido así que regresó a su departamento algo triste.

—¿Es urgente? —Cuestiona el chico sudado, limpiándose la frente con una toalla.

—Compraré la cena para los dos, después de todo estaremos solos hoy. —Responde BangChan al otro lado de la bocina, ChangBin deseaba descansar esos días, pero su líder había decidido pasar el tiempo en el trabajo, había olvidado algunas cosas que guardaba en una USB y le pidió que se la llevara hasta la empresa.

Después de darse una ducha rápida se fue en dirección a la empresa. Esta vez quiso tomar el autobús, por suerte nadie lo reconoció, menos usando una amplia gorra de tal forma que cubría hasta sus ojos, parecía que estaba dormido estando en el autobús.

—¿Y son discretos? —Escucha en susurro, ChangBin no estaba dormido, pero al parecer las dos chicas delante suyo pensaban que sí, por lo que hablaron con más confianza, despertando la curiosidad del chico al no tener nada mejor que hacer.

—Lo son, es mejor pedirlo en línea que ir directamente. —No sabe de lo que hablan hasta que...

—¿Dieciocho centímetros serán adecuados? —ChangBin abre los ojos, aunque por su gorra nadie lo nota, de repente se siente bochornoso el ambiente y quiere moverse y darles privacidad, pero la conversación es imposible de dejar de oír, tanto así que no se da cuenta que ha pasado la estación donde tenía que bajarse.

—Mi amigo gay me recomendó la página, él ha usado varios de los que están ahí, siempre me molesta que los hombres gays puedan soportar más así que creo que es mejor que vayas por uno más grande. —El chico ya no aguanta más, se levanta de golpe llamando la atención de las chicas y baja.

Aunque tarda en llegar a la empresa hay algo que se mantiene en su cabeza. Gays. ¿Él era uno? Consideraba a las mujeres lindas, le gustaría casarse con una, pero no había podido tener un acercamiento con una chica en el sentido romántico. Tampoco era que tuviera mucho interés, hubo una chica, fueron novios, pero fue cuestión de meses, nada más allá de agarrarse de las manos y besos rápidos. Se cuestionaba algunas cosas, no podía pasar por alto las reacciones que su cuerpo tenía sobre todo cuando se trataba de su compañero y líder, después de todo no podía ignorar el aspecto físico de éste. Antes de que se separaran compartían habitación, siempre había pensado en BangChan como un hermano mayor, hablaban de cosas personales, cosas banales, estupideces, peleaban, siempre peleaban, sus ideas y a veces formas de pensar eran opuestas, pero a la vez no podían molestarse, no podían odiarse y esa dinámica se implantó en ellos desde que recuerda.

23 ᴄᴍ [ʙɪɴᴄʜᴀɴ]Where stories live. Discover now