40. perfetto bugiardo.

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capítulo cuarenta
PERFECTO MENTIROSO

capítulo cuarentaPERFECTO MENTIROSO

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Sam y Brianna terminaron de subir las maletas de Chiara, los gemelos y de Brianna a la camioneta del mayor. Ambos, en especial Brianna, estaban contentos de volver a su hogar otra vez. Y la joven vampiro esperaba fielmente que con su regreso a casa, las cosas entre sus padres volvieran a ser como antes y que Sam dejara de actuar como si ocultara algo a su esposa, pero ahora que lo recordaba mejor, el Uley había comenzado a actuar así desde mucho antes de que Chiara y ella se fueran de casa.

¡Por Dios! ¿Qué podría ocultarle? Tal vez Brianna solo estaba sobre pensando las cosas, suponía que estaba bajo mucho estrés con su don y tal vez comenzaba a ver cosas, aunque literalmente también. Pero, como había dicho su madre... las cosas mejorarían, o al menos eso esperaba.

Jacob salió de la casa con Eliza en sus brazos y Chiara junto a Leonardo y Rosalie, está ultima llevaba cargado a Damien.

—Adiós, bebé precioso. —dice la rubia dándole un beso de esquimal al mayor de los gemelos, haciendo que Sam gruña por lo bajo y Damien suelte una risa— Debes traerlos a él y a Eliza siempre ¿si?

—Por supuesto. Gracias por todo, familia Cullen. —dijo Chiara tomando a sus dos hijos en brazos, para molestia de Jacob, quien estaba realmente cómodo con su pequeña Lizzie en brazos.

—¿Estás segura de esto? —le pregunta Leonardo a su hija, ella después de unos segundos asintió.

—Es lo mejor para los niños. —se excusó.

—Pero no lo mejor para ti ¿o si? Sabes que Carlisle y Esme te ofrecieron quedarte el tiempo que fuera necesario o bien, puedes quedarte a vivir conmigo en Seattle. —ofreció Leonardo.

—Estaremos bien. —aseguró la híbrida.

—¡Ya está todo listo! —exclamó Brianna contenta y Chiara se alejó de Leonardo.

Luego de unos minutos, la familia Uley-Lombardi se despidió y salió del territorio de los Cullen, regresando a su casa.

El viaje transcurrió en silencio. Algo incómodo entre Chiara y Sam, pero Brianna intentaba aligerar el ambiente. Y cuando llegaron a la casa, no fue diferente.

Sam les mostró la habitación de los gemelos a Brianna y a Chiara, y esta última solo se quedó callada con Eliza en sus brazos mientras Damien estaba en los de Brianna. Todo era bastante incómodo y aquello incrementó cuando Brianna se adentró en su propia habitación, dejando a sus hermanos menores al cuidado de sus padres, o bueno, de Chiara.

◖ oi, 𝔡𝔞𝔫𝔤𝔢𝔯𝔬𝔲𝔰 𝔞𝔣𝔣𝔢𝔠𝔱𝔦𝔬𝔫 ; s. uley ◗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora