Capítulo 5

29 3 0
                                    

Desde que él se me acercó y me dio un beso, me confirmo lo que sentía por Tsukki, ahora que recuerdo, no le pregunte si le agradaba ese apodo, en el club de voleibol le preguntaré

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Desde que él se me acercó y me dio un beso, me confirmo lo que sentía por Tsukki, ahora que recuerdo, no le pregunte si le agradaba ese apodo, en el club de voleibol le preguntaré.

¡Yamaguchi! —Hinata me sacó de mis pensamientos— Estas sacando demasiadas feromonas, ¿estas bien? —no lo había notado pero era verdad. 

L-lo siento —empecé a tranquilizarme

¿Es tu celo? —negué con la cabeza—¿Entonces?

Puedo preguntarte algo —asintió—. ¿Cómo sabes que te gusta alguien? —escupió un poco de la bebida que estaba tomando.

¿Entonces te gusta alguien no? —sentía que mi cara estaba caliente— Bueno, yo cuando me gusta alguien mi corazón empieza a latir con locura cuando estoy cerca de él, hay veces en las que sueño con él y quiero estar a su lado en diversas situaciones —en esto último note como se ponía su rostro y orejas de color rojo—. Algo en tu cabeza hizo clic, mejor dicho con alguien —me quede pensando y era cierto, sentía eso.

Sí pero no me creo capaz de decirle a él lo que siento —empecé a jugar con mis dedos.

Claro que eres capaz y que Tsukishima te va a aceptar —¿estaba escuchando bien?—. Es más obvio que nada, no te des por rendido, inténtalo —se levantó y comenzó a caminar con dirección al salón.

Después de esa platica paso algo de tiempo, por no decir semanas, donde estuve pensando lo que platicamos, todo me pasaba, las veces donde luego salíamos a platicar o a caminar, cada una de ellas me hacía sentir de esa manera. Ahora que estoy en el club ya esperando para irme, comienzo a sentirme más cansado de la normal pero tendría que quedarme ya que Tsukki quería hablar conmigo.

Lo siento, me tarde más de lo esperado —negué con la cabeza—. ¿Estás bien? 

Me siento más cansado que de costumbre pero, ¿qué es lo que me ibas a decir? —mi respiración comenzó a fallar.

Bueno, siento que esto es obvio pero estoy enamorado de ti, desde hace tiempo comenzaste a gustar, por no decir que el primer día que te vi creí en el amor a primera vista —mis piernas empezaron a fallar en ese instante y caí—. ¡YAMAGUCHI! —corrió hacía mi.

Perspectiva de Tsukishima

Mientras le platicaba como me sentía vi como su cuerpo se desplomo enfrente mío, al ver que no reaccionaba y que su cuerpo comenzaba a calentarse decidí llamar a mi madre para que lográramos controlar lo que estaba sintiendo.

Al cabo de unos minutos ya estábamos en el carro, de camino a mi casa, llegamos y decidí acostarlo en mi cama, viendo como se estaba cubriendo de todas mis cobijas.

 —Tsukki, ven —en el ambiente pude oler como estaba lleno de sus feromonas—. Necesito tu ayuda —mi instinto me hizo acercare a él y comenzar a besarlo, por suerte mi madre salió a trabajar y mi hermano estaría con su pareja. 

Yo no quería hacer algo que no quisiera entonces me separe un poco pero el me atrajo por mi blusa.

Quiero hacerlo solamente contigo, no tengo ojos para alguien más —y de nuevo nuestros labios se unieron.

Mis manos comenzaron a recorrer todo su cuerpo, nuestras ropas iban dejando nuestros cuerpos, estando completamente desnudos. Comencé a introducir un dedo en su entrada notando de inmediato que estaba preparado para mi. 

Me introduje lentamente en él notando que su entrada estaba apretándome sin parar y unas lagrimas recorriendo todo su rostro, besando cada una de ellas. 

Las horas pasaron y cuando estábamos cansados decidimos irnos a dormir abrazados unos a otros pero no me esperaría lo que mañana pasaría.

Perspectiva de Yamaguchi

Me desperté abrazado de Tsukishima, él rodeaba con sus brazos mi cintura provocando que mi cuerpo se sintiera en lo mejor del momento aunque mi celular me hizo saltar del susto, era mi padre.

En llamada

¿Hola? —respondí con un miedo que recorría mi cuerpo.

¿Dónde estás Yamaguchi Tadashi? —era mi padre y sabía que esto no iba a terminar bien.

Bueno...estoy...em... —de la nada escucho como alguien toca la puerta de la casa.

BAJA A ABRIR, ES UNA ORDEN —su voz era más ronca y no se diga que llegaba a oler sus feromonas.

—me levanté lo más rápido que pude, colocándome la ropa y dejando una pequeña nota a Tsukki para que supiera de mi.

Al abrir la puerta me tomo por el pelo, arrastrándome y metiéndome al coche, sin olvidar las palabras que me decía.

¿A caso eres una prostituta? ¿O por qué buscas tanto a ese alfa? ¿De verdad disfrutas estar con él? No te va a dar la vida que mereces.

Esto termino cuando por un golpe me desmaye y no pude mencionar otra palabra más. Pero todos esos momentos tan felices se terminarían en ese instante.

 Pero todos esos momentos tan felices se terminarían en ese instante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 03 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝑴𝒆 𝒍𝒊𝒃𝒆𝒓é  ~𝒯𝓈𝓊𝓀𝓀𝒾𝓎𝒶𝓂𝒶 🍓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora