~° Lonely Together ~ Miles 42 / Prowler / Merodeador

Epílogo

—¡Abu Miggy!—

Aquel hombre volteó de inmediato al escuchar aquella vocecita, reaccionando justo cuando brincó a sus brazos.

—Hola, princesa ¿Qué haces aquí?—

—El tio Hobie me llevó a pasear a su mundo.—a Miguel no le hizo mucha gracia eso.

—¿A ese mundo feo e inestable como él?—

—Que chistoso eres.—el guitarrista apareció junto a Pav.

—¡No es feo!... Pero mi papá dice que no se baña.—Miguel rió al escuchar que eso último lo dijo en un susurro.

—Pues muy equivocado no esta ¿Quieres ir a ver un mundo lindo con gente que sí se baña?—

—Shh, no lo digas tan alto.—

Miguel cargó a la niña sobre sus hombros, acercándose a Hobie.

—Me la llevo.—

—Diría que no, que ____ me la encargó a mi pero... No te importa y no me harás caso.—

—Asi es, me la llevo.—

—¡Adiós tio Hobie, gracias por cuidarme!—

El guitarrista saludó con una sonrisa a la niña que salía del lugar.

~•~

—¿De verdad podemos ir a la luna?—

Lyla miraba sorprendida aquella especie de tren que subía hasta el cielo.
A pesar de que visitaba bastante seguido a Miguel, nunca había salido de la base. Y ahora estaba fascinada con lo hermosa y frenética que era.

—A donde tú quieras, pequeña.—

—... ¿Podemos ir a una tienda de dulces?—

—No sé si tu mamá me deje comprarte mucho de esos.—Lyla tomó sus orejas, tironeando apenas de ellas.

—Es que en casa ya no hacen mis gomitas favoritas, y mamá dijo que en otros mundos, como el de tio Hobie, el tiempo y las cosas pasan diferentes... Tal vez aquí las tengan...—abrazó la cabeza del hombre, apoyando el mentón, en su coronilla—. ¿Podemos ver, abu?—

Miguel suspiró, extendiendo su brazo y lanzando una telaraña.

—Tú ganas, pero me defiendes de tu madre si se enoja ¿Si?—

~•~

—... ¿Hablo en quechua o qué?—

____ miraba enojada a Miguel, quien intentaba atrapar a la niña que corría por el techo.

—Ni siquiera te la dejé a ti ¿Dónde está Hobie?—

—... Él me la dejó.—la mujer enarcó una ceja—. Bueno... Yo se la saqué.—

—¡Oye! No lo retes a mi abue.—

____ se dio un buen susto apenas la niña le lanzó telaraña a la cara.

—¡Mi bebé también tira telaraña!—Miles atrapó a la niña, quien buscó de inmediato escudarse del inminente reproche de la madre.

—No le festejes eso...—

—Pero es algo genial, mi bebé es genial.—

—No soy una bebé, papá...—

Miguel sintió algo bonito al ver la pequeña familia, cuando un golpe de nostalgia lo alcanzó.
La pequeña Lyla no tardó en notar al hombre algo ido, por lo que escapó de los brazos del padre y se acercó a él.

—No te pongas mal, abu. No voy a dejar que mamá te rete de nuevo.—

El hombre sonrió antes de volver a tomarla en brazos.

—Mi pequeña heroína, gracias.—

Al ver como su hija abrazaba a Miguel, ____ le bajó a su molestia.

—Bueno ya, siéntense a comer.—

—¿Yo también?—

—Pues sí, te quedarás y jugarás con Lyla hasta que esa adrenalina de azúcar se le pase.—____ le señaló la mesa—. Vamos, comeremos empanadas~

Aquello emocionó a Miguel.

Que afortunado se sentía.