42. Bosque, lavanda y almendras

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Ho Seok, Yoon Gi y Jung Kook están en el sofá hechos bola mientras ven una película, no siempre pueden disfrutar de un sábado todos juntos y son felicidad en sí mismos. La mezcla del aroma a bosque, con el de vainilla y café, da una sensación de estar al aire libre comiendo bizcocho con café, es extraño, pero increíblemente agradable. Están los tres ensimismados, cuando el móvil de Ho Seok irrumpe en medio de la escena.

Jung Kook se crispa de golpe pensando en que sean de la clínica y se lo quieran llevar, no, no se lo pueden llevar, es el día para ellos. No es consciente del puchero que se le ha hecho y cuando Ho Seok se levanta del sofá, Yoon Gi le da un beso para que quite el puchero y con el dedo le estira el ceño fruncido.

—Todo va a estar bien, —dice sin más Yoon Gi con una pequeña sonrisa, pero en el fondo también teme que se lo lleven.

Ho Seok entra en la habitación y ve el móvil encima del escritorio, su frente arruga al ver que la llamada entrante es de Ji Min.

—¿Ji Min? —Contesta a la llamada sin rodeos.

—Ho Seok hyung, hola, ¿todo bien? —pregunta algo nervioso.

—¿Sí? —responde dudoso—. ¿Todo bien? —repite la pregunta.

—Sí, es que, bueno, quería quedar contigo y con Seok Jin hyung, porque bueno, quería consultaros una cosa sobre Nam Joon y vosotros sois sus mejores amigos, —explica con un tono de voz claramente nervioso.

—Bueno, —dice Ho Seok mientras sale de la habitación—, si Jung Kook y Yoon Gi me dejan, no tengo problema, —termina diciendo con una sonrisa.

—¿Quién es? —pregunta Jung Kook molesto.

—Toma, es Ji Min, —dice ofreciéndole el teléfono.

Jung Kook no entiende nada pero coge el móvil y empieza a hablar con su amigo, claramente molesto porque le quieren robar a Ho Seok.

Yoon Gi quiere entender qué pasa y aunque Ho Seok tampoco entiende mucho, le explica que Ji Min quiere verse con él y Seok Jin. Deducen que es por algo de Nam Joon, pero no es hasta que Jung Kook le devuelve el teléfono que parecen acordar algo.

—Dos horas os doy, —dice Jung Kook firme.

Tanto Ho Seok como Yoon Gi se ríen.

—Qué generoso... —comenta Ho Seok con burla.

Finalmente queda con Ji Min en que le pasa a buscar para ir a casa de Seok Jin. Jung Kook se queda refunfuñando pero Yoon Gi tiene intención de que el enfado se le pase rápido.

Cuando Ho Seok pasa a por Ji Min, éste está de lo más emocionado, Ho Seok está por jurar que jamás le ha visto así. Parece que lo que quiera que tengan que hablar de Nam Joon no es malo, por lo que no hay razón para estar tensos.

Una vez en casa de Seok Jin, se sientan en el sofá con toda una merienda frente a ellos. Tanto el alfa como el beta sienten el potente olor a lavanda que desprende el omega. Debe de estar realmente emocionado por lo que quiera que vaya a decir.

—Me imagino, que ya sabéis que el cumple de Seok Jin está a la vuelta de la esquina, —dice mientras los dos asienten—. Me gustaría poder hacer algo especial.

—Sabes que Nam Joon es un alfa sencillo, —comenta Seok Jin para que no se complique mucho.

—Sí, lo sé, no quiero prepararle una fiesta ni nada así, claro que me gustaría que comieramos o cenásemos todos juntos, pero quiero regalarle algo, pero algo especial, no sé algo que no pueda esperar. —El entusiasmo de Ji Min es palpable, los otros dos se sienten un poco abrumados y no saben muy bien qué pueda estar buscando el omega.

—¿Pero quieres algo en particular? —pregunta Ho Seok con el fin de concretar un poco.

—A Nam Joon no le gusta demasiado acumular cosas que no sirvan y un libro es demasiado simple, aunque ya le he comprado dos, pero eso da igual, quiero algo más... como una experiencia, o sea, como si fuésemos al parque de atracciones, pero sé que eso no le gusta, pero algo así. —Vuelve a coger carrerilla con todo lo que dice volviendo a dejar sin palabras a los otros dos.

—Podríamos irnos a pasar el día al campo, —propone Seok Jin.

—Eso puede estar bien, —coincide Ho Seok—. Nam Joon en la naturaleza es feliz, es como si estuviera en consonancia con su elemento.

—Tal vez...

El alfa y el beta pueden ver como la mente de Ji Min maquina algo, no le quieren interrumpir en lo que sea que esté pensando pero les da un poco de miedo.

—¿Y si nos fuésemos un fin de semana de casa rural? —suelta finalmente.

—¿Todos? —pregunta confuso Seok Jin.

—Claro, podemos ir a una casa todos, no sé, como unas pequeñas vacaciones, pero solo el fin de semana, por si ya empezáis con las clases, —dice mirando a Seok Jin.

—Eh... bueno... —La verdad es que Ho Seok no sabe qué decir, no le parece mal plan, pero tampoco tiene claro que sea lo mejor.

—Lo podemos preparar todo y les damos una sorpresa cuando celebremos el cumple de Nam Joon. No tiene por qué enterarse nadie y estoy seguro de que a Jung Kook y Tae Hyung también les va a encantar.

—Eso es un golpe bajo, —susurra Seok Jin.

—No es un golpe bajo, es un empujoncito, —quiere quitarse culpa el omega haciéndose el cachorro bueno.

—Vamos a tener que cuadrarnos muy bien, —objetar Seok Jin—. No creo que vaya a ser cosa fácil.

—No nos pongamos dramáticos, seguro que algo podemos encontrar y que no sea muy caro, —dice Ji Min entusiasmado.

Ho Seok se siente un poco confuso con la actitud del muchacho, está demasiado entusiasmado con todo esto, pero no serán ellos quienes le amarguen la ilusión.

La primera parte del plan es cuadrar el día para el cumple de Nam Joon. Seok Jin habla con Tae Hyung al respecto y después Ho Seok con Yoon Gi y Jung Kook, éste empieza a decir que las dos horas están a punto de pasarse y puede escuchar un comentario de Yoon Gi que hace que se le erice la piel, ojalá poder estar en casa.

Bien, parece que consiguen cuadrar un día para elcumpleaños de Nam Joon, para entonces deben tener perfectamente trazado el plande la escapada, ¿saldrá? Quién sabe, pero esperan poder tenerlo todo cuantoantes. No van a negar, que la idea a ellos también les emociona.

☘️TARDE DE OTOÑO☘️ -SOPEKOOK-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora