Reflexion

El Adios

Nosotros crecemos con muchas personas a nuestro alrededor, pero no todas ellas son importantes para nosotros, pero las que si lo son nosotros les abrimos la puerta de nuestra casa como la de nuestros corazones, y hasta llegamos a llamarlos familia, aunque no tengamos la misma sangre.

Ellos marcan en nuestras vidas un antes y un después, en el momento que aparecen nos empiezan a dejar enseñanzas que nunca vamos a olvidar, recuerdos que a pesar de los años siempre van a seguir pensando, olores que te traen a esa persona a la mente sin importar el tiempo que pases sin verla ni escuchar de ella.

El dilema con estas personas, es que nos generan un sentimiento tan fuerte que no nos deja respirar, que nos da ganas de ir y abrazarlos y nunca soltarlos, nos brindan confianza, amor y lealtad, las cosas mas valiosas en una relación, ahora… te debes estar preguntando y porque esto seria un dilema sentir cosas tan hermosas por alguien que brinda todo lo bueno.

Que a la larga o a la corta la vida te los va a robar, te los va a quitar de tu lado, porque cada persona esta destinada a dejarte una enseñanza o tomar tu mano cuando te caigas, pero por un debito tiempo, las relaciones arrancan por algo y terminan por algo, las relaciones no son para siempre por mas que lo intentes, va a llegar un momento en que esa persona no te va necesitar o vos a ella, en el que la vejez o la enfermedad se los lleva de este mundo para llevarlos a otro.

Y lo más triste, es que hay que dejarlos ir, por la simple razón que no queda otra…

El sentimiento de perder a esa persona, de despedirla, es una de las emociones mas fuertes y dolorosas que puede sentir una persona, vas a sentir que te quitaron un pedazo de tu alma, que no podes vivir con ese sufrimiento, pero Tenes que afrontar el duelo y seguir adelante porque tu persona querida asi lo hubiera querido, que seas fuerte y que pase lo que pase nunca lo olvides.

                                                                                                                                      Milton olazabal