My Funny Valentine || Paddy Gibson ©

5 | ¿Tell the lie or the truth?

📍 15 de Junio de 2021 | Budapest, Hungría

Narrador Ominipresente:

Las mañanas en un Budapest en épocas de verano se les podía considerar cálidas y frescas a diferencia del medio día que todos los integrantes de producción imploraban salir rápido por las lluvias torrenciales que parecían  como si el mar descendiera en el país europeo.

Aunque esta mañana, el clima estuvo en contra de la venezolana que con los ojos medio cerrados fue directo al baño a darse una ducha de agua fría por el sofocante calor que hacía, para después arreglarse para su trabajo, cambiando su hoodie de color negro por una franela ceñida a su cuerpo que era de tela fresca. Se apuró al ver la hora la cuál quedaban unos minutos para que se fuera su tiempo y llegara tarde a su primer trabajo de la mañana.

Verdaderamente empezar este día, fue con el pie izquierdo.

Al bajar del taxi corrió por todo el set, solo saludando con una mano a quienes la reconocían por aquella melena larga y lisa recogida en una cola o porque su bolso de lunares brillaba en un mar de negro y gris.

—¡Llegué!—gritó al abrir la puerta del trailer, apoyándose en el marco y David la vió con duda.

—¿Sabes que empezamos más tarde, verdad?—preguntó tranquilamente el hombre y él vió como los colores de su rostro se fueron a sus mejillas, haciéndolo reir.

—Cállate, acabo de quedar en ridículo—dijo, tapándose el rostro con una mano mientras se dirigía pesadamente a su asiento y sentándose ahi.

Se miró en el espejo y quiso gritar por tales ojeras que se marcaban bajo sus pestañas cortas y los labios cuartiados en pequeños fragmentos blancos que la hizo apurarse en buscar alguna vaselina entre sus cosas para echarselo en sus labios.

Por más que a veces se le olvidaba arreglarse un poco más ella misma por estar atenta a otras cosas, esta vez si se había pasado de la mano. Y sabía el porque de su desatención.

—Yo iré a buscar a Lila para desayunar ¿vendrás?—consultó y ella negó rápidamente.

—Ni loca voy para allá luego de lo que acabo de hacer.

Él se rió por ello y tomó su lonchera más un pequeño termo sin antes dejar un beso en su frente—Vengo en un rato.

Se despidió del hombre para seguir con sus asuntos y ordenar su mente, pero el sonido de un mensaje la sacó de sus pensamientos y revisó por encima el mensaje de su padre que la hizo abrir los ojos de par a par.