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Camila no sabía que esperar mientras avanzaba a su despacho aquella mañana, se había pasado todo el fin de semana pensando en lo que había ocurrido con Lauren el viernes y no se había podido sacar a la otra mujer de la cabeza.

Cuando llegó a los despachos Dinah y Ally ya estaban allí y no pudo evitar mirar la puerta de Lauren durante unos instantes.

"No ha llegado todavía" Dijo Ally sacando a Camila de su trance.

Camila miró a la mujer y asintió y después se disculpó y entró a su oficina.

Pasaron diez minutos y mientras Camila tecleaba en su ordenador escuchó como una puerta cercana se abría y cerraba y supo que Lauren había llegado. Se levantó de su silla y caminó hacia la pared que compartía con la otra mujer y apoyó la oreja, pero no escuchó ningún sonido. Camila suspiró y apoyó su frente en la pared cerrando los ojos.

Le había contado a Lauren su gran secreto, le había presentado a su hija y además había admitido que ella también se sentía intensamente atraída hacia ella y ahora no sabía que pensar. Lauren había estado avergonzada de despertarse en casa de Camila tras haber quedado casi inconsciente en la fiesta, pero también era evidente que estaba abrumada por todo lo que había descubierto aquella mañana.

Camila seguía apoyada allí cuando escuchó un sonido, no era un golpe exactamente era más bien como si alguien estuviese también apoyado al otro lado de la pared y Camila se preguntó si Lauren se encontraría en la misma posición en la habitación de al lado.

"¿Lauren?" Dijo en voz alta, pero sin llegar a gritar.

Camila escuchó el mismo sonido de antes y supo que Lauren se había separado sorprendida de escuchar su voz.

Camila no sabía qué hacer, no sabía que decir, pero necesitaba saber que la otra mujer estaba bien, que no la odiaba por haberle ocultado una parte tan grande de su vida. Se separó por fin de la pared y se dirigió a su puerta, una vez fuera fue directa a la de Lauren.

"Camila, Lauren me pidió que nadie la molest..." Pero Ally no pudo terminar la frase porque Camila ya estaba dentro de la habitación y cerró la puerta tras ella.

Tal y como había sospechado, Lauren estaba junto a la pared que separaba ambos despachos.

"¿Podemos hablar?" Dijo Camila.

"¿De qué quieres hablar?" Dijo Lauren caminando hacia su mesa y sentándose allí sin mirar a Camila a los ojos. Parecía enfadada de nuevo, mucho más enfadada que cuando se había ido de casa de Camila el sábado por la mañana.

"De... quiero hablar de..." Pero Camila no podía concentrarse porque Lauren no la miraba y la estaba volviendo loca "Lauren, mírame por favor"

Lauren alzó la vista de los papeles que tenía delante para mirarla y Camila se preguntó si era una mala idea haberle pedido que la mirase, porque aquellos ojos verdes estaban penetrando dentro de su alma.

"Quiero saber si estás bien" Dijo finalmente Camila "Si estás... enfadada conmigo y... también te quiero pedir perdón por ocultarte... la existencia de Mia"

Lauren suspiró y bajó la mirada un instante para volver a subirla "No me tienes que pedir perdón por no hablarme de tu hija" Comenzó diciendo "Me hubiese gustado que lo hubieses hecho, pero lo entiendo... lo que no entiendo es... como te has comportado conmigo las últimas semanas" Dijo firmemente.

Camila la miraba y Lauren siguió hablando "No soy una adolescente, no tienes que protegerme de nada ni de nadie Camila, y hacerme creer... hacerme creer que había hecho algo malo cambiando tu actitud conmigo... eso es lo que más daño me hizo"

Secretos [Camren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora