Enmu no peleaba. Él pensaba las cosas, planeaba todo cuidadosamente y luego actuaba de una manera impecable y controlada. Cuando Akaza se estrelló contra los vagones del tren y atravesó su cuerpo, otro grano de arena en los engranajes de su plan per...
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Inmediatamente se convocó otra reunión de Pilares cuando Kyojuro transmitió su informe a Ubuyashiki, apenas una semana después de que ocurriera la misión del Tren Infinito.
Pidió la presencia de los tres cazadores que lo habían acompañado en la misión, sintiendo que ellos también necesitaban saber qué había sucedido y que sus propios relatos de sus sueños podrían darles una mejor idea de cuán confiables podrían ser. Su propio sueño había sido arrancado directamente de sus recuerdos, pero había sido igual que en aquel tiempo.
El sueño de Akaza había sido caótico, desordenado, casi inestable. Habían pasado tantas cosas que Kyojuro temía olvidar un detalle crucial, pero al mismo tiempo su propia memoria de los recuerdos era muy clara. La primera noche que estuvo de regreso en la finca de los Rengoku después de la misión, había pensado en poner esos pensamientos en papel—pero no se sentía correcto dejar un rastro de algo tan... personal.
En cambio, había mirado a la luna y se preguntó si Akaza también lo recordaría todo.
No había otra explicación para sus ojos grandes y aterrorizados cuando se habían despertado, ni la forma en que había huido cuando había estado tan interesado en una pelea cuando apareció por primera vez.
Kyojuro ya no sabía qué sentir respecto al demonio.
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"Apenas una semana y otra vez estamos todos aquí," se quejó Shinazugawa. "¿Estás seguro de que no pudo haber sido un informe normal, Rengoku?"
"¡Lamento mucho que todos ustedes hayan tenido que viajar de nuevo! Pero no, creo que es mejor que lo escuchen en persona. ¡Estoy seguro de que ustedes también tendrán preguntas!"
"Como sea," el Pilar del Viento agitó una de sus manos.
Era bien entrada la tarde, el sol descendía gradualmente en el cielo cuando finalmente se sentaron alrededor de Ubuyashiki. Kocho había traído a los tres jóvenes cazadores con ella, su inquietud era palpable en el aire.
Kyojuro contó lo que sucedió en el Tren Infinito, cómo la Luna Inferior 1 había logrado atraparlos en un sueño y cuál era la única forma de escapar de él. Cómo el demonio se había fusionado con todo el tren, amenazando con comerse a todos los pasajeros y que había encargado a dos de los jóvenes cazadores que lo decapitaran para poder concentrarse en garantizar la protección de todos.
"Y luego," dijo, "me encontré con una Luna Superior."
Todos los Pilares estaban un poco más atentos. Kyojuro trató de expresar cómo se había sentido, cuán imponente y poderoso había sido su oponente. Era difícil encontrar las palabras adecuadas para describir el gran peligro y la presión que Akaza tenía arremolinándose a su alrededor, cuán ridículamente amplia era la brecha entre las Lunas Inferior y Superior.
