Capitulo 53

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- Me morí... -

En medio de una colina despejada, una pequeña mancha oscura reposaba sobre el césped boca abajo

- Oye, levántate Esperpento - Pero una más grande le pateó su pie para levantarla, aunque está ni reaccionó

- No puedo, estoy muerta - Respondió la mancha sin levantar su cabeza, incluso ignorando ese horrible apodo

- Si estuvieras muerta, no hablarías y tampoco estarías cansada, levántate - Le resto importancia mientras la veía desde arriba

- Ugh.... Soy un zombie, Ugh... - La pequeña empezo a mover sus brazos de forma extraña mientras hacía sonidos ahogados con su boca

- ... Eres el peor zombie que he conocido en vida, y eso que me encontré con varios - Afirmó el Mago viendo a Delia con decepción

- ..... -

- Anda, ya levántate y deja de jugar, tenemos mucho que hacer hoy y tengo la nula esperanza de llegar a la mansión de Argus y dormir en una cama - La apresuro mientras pasaba sobre ella para poder caminar hacía delante

- Mh... - Se quejo la pequeña levantando muy apenas su cabeza para ver a su profesor - Pero estoy muy cansadaaaa... - Exclamó alargando la última palabra

- Ya somos dos -

- Pero aún no llegan el Señor Hugo y Margo - Le recordó a la par qué se levantaba y caminaba con pasos pesados detrás de el

- Puedo verlo -

- Y acabamos de llegar de correr, ¡Me duelen mucho los pieeeessss! - Exclamó está con una gran mueca mientras se inclinaba hacía delante

- Y a mí me duele hasta el alma, ¿Seguimos? -

- ¡Pero señor Tooooommmm! - Gruño la niña mirando suplicante al adulto, quién ya estaba teniendo un tic nervioso en su ojo

- Es el último jodido trabajo que acepto de ti Argus.... - Fue su queja casi inaudible

Ambas figuras de cabello oscuro caminaron colina bajo hasta llegar a una zona más plana, a la vista de las orillas donde comenzaba el Bosque Hive

Dónde el mayor observó por unos instantes, y tras asegurarse de que no hubiera ninguna sola presencia más allá de lo que el podía localizar, fue qué se giro un poco solo para ver a esa mocosa arrastrando sus pies hasta el

- Tardamos exactamente 4 horas y 57 minutos para llegar, sin contar el tiempo que nos retraso tras tu colapso - Informo el adulto observando a la pequeña, quién resignada tuvo que escucharlo de pie - Está fue la mitad del tiempo en que tú y el guardia de Argus recorrieron desde el interior del Bosque Hive hasta la Mansión Keller, se puede decir que hicimos un buen tiempo para alguien como tú -

- ¿Eso es bueno? - Preguntó dudosa la pequeña

- Mh... Considerando tu edad y falta de experiencia, si, te diré mis observaciones ahora - Exclamó está ves sentandose en el suelo, acción que repitió la niña con mucho gusto - Escucha, tu resistencia es buena, puedes correr alrededor de 525Km en casi 5 horas, eso sería más o menos 100Km por hora, ¿Entiendes? - Informo mientras sacaba de su cinturón otro frasco con sangre

- Si - Afirmó ella con sus ojos brillantes, al parecer, lo que entendió de su profesor fue que era igual de rápida que cierto erizo de cierta película y ciertos videojuegos, lo que la emocionaba mucho

- Bien, al menos captas rápido las cosas - Hablo para si mismo destapando con fuerza el frasco y bebía de un trago la sangre en el - Uff... - Soltó un suspiro aliviado mientras limpiaba su boca con su mano - Pero esto tuvo una consecuencia, no pudiste manejar tu magia, la acumulaste en uno de los peores lugares posibles mientras corrías, los pulmones - Le contó mientras la observaba

¿Villana? Ella es de todo menos una villana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora