Capítulo 77

459 78 12
                                    

Cómo era de esperarse, las cosas solo fueron de mala en peor en menos de unas semanas

- Delia... -

Margoth llegó a la habitación, se había hecho algo tarde para su hora habitual de llegada

Por suerte, Delia parecía estar acabando de comer nada más verla entrar a la habitación

- ¡Hola Margo! - Saludó la pequeña con una sonrisa encantada por la presencia de la muchacha - ¿Como te fue hoy? ¿Te dieron mucho trabajo? ¿Quieres sentarte? ¡Siéntate un rato conmigo si quieres! ¡Te guarde una parte de lo que preparo el Señor Hugo por si aún no has cenado! - La invitó con una sonrisa en su rostro

Los trabajos para los dos tutores de la pequeña Delia Keller habían aumentado considerablemente, no se sabia si esto era obra de la Duquesa o el Duque, pero la frecuencia con la que ambos visitaban o podían llegar a estar con la más pequeña había disminuído demasiado desde la llegada de los Duques a la mansión Keller

Ahora quien parecía pasar más tiempo con ella parecía ser...

- En verdad que se están pasando con esta mierda - Se dió a conocer Tom, quien estaba sentado en el suelo con un plato vacío de comida a un costado suyo

- Oh, buenas noches Tom, no te había visto ahí... - Tom solo resoplo ante el saludo de la mujer, y siguió murmurando para si mismo algunas cosas inentendibles que ella ignoro, solo por qué captó con su vista a una presencia más en la habitación - ¿Hugo se quedó dormido? - Preguntó Margo al ver a su mayor durmiendo profundamente en el sillón

A pesar de su gran tamaño y la edad que tiene, Hugo parecía estar durmiendo como un gran bebé en el viejo sillón de tres asientos de la habitación de Delia, no hacía mucho ruido al roncar, la cobija que lo cubría estaba medio caída, eso le permitió ver qué aún estaba en su uniforme de Asistente de cocina de la familia Keller el cual no se a cambiado, solo tenía los primeros tres botones desabotonados y las mangas arremangadas

- Si - Afirmó Delia con una sonrisa comprensible mientras miraba al cocinero - El señor Hugo llegó con el carrito cuando el señor Tom y yo estábamos viendo el mapa de la zona, dijo que iba a descansar un momento y que cuando terminara de estudiar y limpiarme las manos, el me serviría la cena y cuándo acabara se llevaría los platos sucios para lavarlos más tarde, pero se quedó dormido nada más sentarse y cerrar los ojos - La puso al corriente mientras se acercaba al adulto mayor y le acomodaba la cobija con cuidado de no despertarlo, no quería que pasara frío mientras descansaba

- Oh... Veo... - Comento con una voz agotada la sirvienta, arrastrando sus pies hasta el sillón en que se encontraba Hugo mientras se deshacía del apretado e incómodo moño en su cabello, dejandolo libre una vez que se recostó de la misma forma en el sillón de tres asientos - Estoy tan agotada... Me duele todo... Esa maldita vieja necesita urgentemente unas vacaciones - Declaró mientras posaba su brazo sobre sus ojos y hacía descansar su agotado cuerpo

- Lo que necesita esa vieja es a alguien que se la coj-... -

- ¡Ni se te ocurra terminar esa frase! - Rechisto Margo al saber lo que diría, después de todas las semanas que tuvo que convivir con el (no por voluntad) le hicieron darse cuenta la clase de actitud tan grosera y mal hablada que tenía

Por suerte Delia no imitaba ese comportamiento y vocabulario al que estaba expuesta, pero aún así no quería que esa clase de cosas se dijeran en su presencia

- Tsk, lo que sea, de todos modos es verdad, todos en esta jodida mansión han perdido la cabeza, ni siquiera se por que ese descerebrado de Argus me pide consejos si no va hacer una mierda y solo hará lo que se le venga en gana - Se quejo el Mago con una mala actitud

¿Villana? Ella es de todo menos una villana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora