Capítulo 36

934 59 27
                                    

-¿Cómo? -pregunta él anonadado.

-Lo que has oído, que me quiero casar contigo.

-¿Estás segura de lo que me estás diciendo Sofia?

No, por supuesto que no estoy segura, pero es lo que debo hacer.

-Sí, sí que estoy segura, el tiempo que he estado fuera me he dado cuenta de que tú eres una buena persona, que siempre has estado a mi lado y siempre has querido lo mejor para mí, me he dado cuenta de que me gustas, quiero estar contigo, por eso me quiero casar contigo.

-Dios mío, no me puedo creer lo que me estás diciendo, no sabes lo que significa esto para mí, me has hecho la persona más feliz del mundo, ¿sabe tu madre que te quieres casar conmigo?

-Sí, ella sí que lo sabe, lo he hablado antes con ella esto.

-¿Has hablado con tu madre y le has dicho que estás enamorada de mí?

-Algo así.

-Entonces ya no hay más que hablar, solo queda decírselo a mi familia y nos podemos casar si quieres la próxima semana. -abro los ojos y la boca como platos.

¡Se ha vuelto loco, cómo que la próxima semana!

-¿La próxima semana? Es demasiado precipitado eso Mateo.

-Llevo demasiado tiempo esperando este momento, podemos organizarlo todo esta semana, podríamos casarnos el fin de semana incluso.

-Pero si en nada es Navidad.

-¿Y que? Mejor todavía, este va a ser nuestro gran regalo de Navidad, ¿o tú no quieres casarte cuanto antes conmigo?

-Sí, sí que quiero. -respondo nerviosa mintiendo.

-Entonces no hay más que hablar, voy a llamar a mi madre para contárselo todo, esta misma tarde nos reuniremos todos para ver cómo organizamos la boda, pero en menos de dos semanas estaremos casados, Sofia.

Me abraza y yo le abrazo sin ningún tipo de expresión en mi rostro, cuando nos separamos miro hacia atrás, el coche negro sigue ahí, pero parece que la persona que está dentro del coche no ha salido todavía.

-Entonces esta tarde nos vemos para hablar de todo Mateo, ahora tengo que volver a mi casa.

-¿Estás segura de que te quieres casar conmigo?

-Sí, sí estoy segura... -hago una pausa y sigo hablando- Pero... yo igualmente creo que es mejor que nos esperemos un tiempo, antes de casarnos deberíamos de estar saliendo un tiempo como pareja para saber como nos llevamos y ya después...

-Tiempo ninguno, los dos sabemos que nos llevamos bien, nos conocemos desde hace años, nos casamos ya y punto, ya tendremos tiempo de conocernos más a fondo una vez estemos casados.

-¿Pero dónde vamos a vivir? Y además, tú y yo no trabajamos, ¿cómo vamos a vivir juntos sin trabajar ninguno de los dos?

-Por eso no te preocupes, yo la próxima semana empiezo las prácticas en el hospital y me van a contratar seguro, tú puedes trabajar en cualquier trabajo mientras estudias, y por la casa tampoco te preocupes, tengo una casa que está a una media hora en coche de aquí, la casa es de mis padres, pero me dijeron que cuando me casara esa casa pasaría a ser mía, no sabes lo contenta que se va a poner mi madre, ella estaba deseando que tú y yo nos casáramos, al igual que la tuya.

Que me va a contar, si me fui de esta zona porque mi madre me quería obligar a casarme con él, y fíjate ahora como estoy, quien me lo iba a decir a mí hace unos meses que me iba a pasar todo esto, creo que se lo cuento a cualquier persona y no me creería, se pensaría que le estoy contando un libro o una película seguro.

Él, mi peligro... Ella, mi perdición Where stories live. Discover now