Capitulo 15

99 39 77
                                    

Nunca pensé que esto sucedería así.

Cuando volví a Santiago sabía que en algún momento me enfrentaría a André y todo lo que había dejado.

Pero nunca pensé que fuera tan pronto. Menos de esta manera.

Aún me estoy adaptando a esta nueva realidad y siento una inestabilidad constante. Más cuando veo el rumbo que tomaron las cosas sin mí aquí.

Yo jamás le habría deseado el mal ni a ella ni a André. Es más, todo lo hice para que fueran felices. Formarán una familia y al fin André hiciera lo que nunca logro conmigo.

Madurar.

Debo decir que jamás pude poner límites en nuestra relación. Yo aceptaba toda las estupideces que él hacía. Perdonaba todo. A él solo le bastaba besarme y decirme que me amaba para que todo quedará en el olvido.

Yo creía que así era el amor. Devastador, doloroso y muchas veces desigual.

Cuando lo ví en el restaurant sentí mi mundo desarmarse y la clara verdad. No habría nada que pudiera arrancar lo que sentía por él.

No importa lo que me hubiera hecho.

No importa el dolor que me causo.

Y es esa la verdad con la que debo luchar. No puedo permitir que vuelva a tener ese control sobre mi.

Aunque sea quien hace sentir que mi corazón sirve para algo más que para bombear sangre.

Quien me hace sentir viva.

Pero también me hizo querer no estarlo.

— No pensé que estarías con ella — su voz me hace buscarlo. Sonríe desde la puerta de la sala donde trae mi vaso y una cerveza—. Ella suele ser muy tímida.

Su sonrisa se ilumina al hablar de la pequeña. Ese simple gesto hace que se vea aún más guapo, si es que eso se puede. Me aclaro la garganta e intento parecer normal. Me cuesta aligerar mi mente cuando se propone hacerme sentir miserable.

— Es adorable... se parece mucho a ti.

— Sí, la mayoría piensa lo mismo — me mira como siempre lo hace, como si me estudiara. No lo culpo yo hago lo mismo.

Se ve muy cómodo, y quiero creer que es así. Que podremos hablar y no estallara una bomba nuclear en su sala.

Yo en cambio siento que estoy emitiendo radiación. Estoy muy nerviosa.

Se acerca lo que creo son los segundos más largos de mi vida, no tiene nada que envidiar a un modelo de revista. Y por más que quise engañarme pensando que solo era su físico lo que me atraía de él. Descubrí que un cuerpo perfecto no lo es todo.

Benjamin podría decirse es tan guapo como André, pero yo nunca he querido morderlo mientras me habla de cosas triviales.

Cómo está pasando ahora.

Espera ¿Que?

— Es lo más importante en mi vida ahora — su voz corta el trance momentáneo y desvío la mirada a cualquier cosa que no sea él.

No me mira cuando toma asiento a mi lado. Yo tampoco lo hago.

No puedo, me da miedo que pueda leer lo que pasa conmigo en este instante.

Mi corazón se aprieta un poco más con su cercanía.

— Vaya...

— ¿Que?

— Nada... olvídalo... Pero ¿Es por esto que casi quedas sin trabajo en el restaurant? — no podría preguntar esto si lo estuviera mirando. Yo pensé en muchas cosas menos en esto.

Casi Te OlvidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora