Capítulo 20

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Tae


—Una caja más, cariño —dijo Xiaojun mientras llevaba una gran caja marrón de chaquetas de cuero de motoristas hacia mí.

—Claro, no hay problema —respondí. Xiaojun se encontraba a mi lado en sus ajustados pantalones de cuero rojo y una camiseta negra de los Hangmen. También llevaba su parche de Propiedad de Hendery. De hecho, rara vez se lo quitaba.

Cuatro semanas habían pasado. Cuatro semanas de estar con Jaehyun, explorando nuestros cuerpos, montando la parte trasera de su moto, probando la carrera embriagadora de la libertad. Y cuatro semanas de él enseñándome a tocar la guitarra. Realmente me encantaba. La música se había convertido en mi pasión. Mi obsesión. Cada serie de acordes movía algo dentro de mí; cuando tocaba música, sentía que realmente me había encontrado, encontrado a la persona que siempre estuve destinada a ser. Compartir ese amor con Jaehyun sólo hizo más intensa mi pasión.

Incluso comenzó a enseñarme lenguaje de señas. Odiaba no ser capaz de comunicarme con él cuando estábamos en compañía de otras personas, así que le recordé enseñarme una seña en cada oportunidad. Xiaojun también me había ayudado.

También tenía un trabajo. Convencí a Jaehyun para dejarme trabajar con Xiaojun ahora que Kangin había sido... eliminado... y la amenaza hacia el club se había ido. Traté muy duro de no pensar demasiado en ese lado de las cosas. No podía soportar imaginármelo de ese modo; tan agresivo, tan brutal. Sabía que estaba siendo ingenuo, pero quería que todo fuera positivo y resuelto por un tiempo. Y Jaehyun era más que hermoso conmigo.

Había estado reacio a dejarme trabajar, con la tienda de Xiaojun estando lejos de él y el recinto. Le preocupaba que el mundo exterior fuera demasiado para mí, pero últimamente, lo permitía y lo adoraba por ello. Entendió que necesitaba experimentar la vida más allá de él... más allá del club. Xiaojun me tomó bajo su ala y estuve trabajando en su tienda, Ride, por dos semanas. Cada día, Jaehyun me llevaría a trabajar en la parte trasera de su Harley y a recogerme al final del día para llevarme a casa.

Era todo tan... normal. Aprecié sentirme normal. Cuando has estado desterrado de la gente toda tu vida, la normalidad se vuelve... hermosa.

El uniforme de cuero que tenía que usar en Ride era... diferente: pantalones de cuero ajustado y una camiseta de los Hangmen muy ceñida, pero en realidad como que me gustaba también. Construía poco a poco mi propia vida con un hombre al que adoraba y amigos con los que amaba pasar mis días. La mayoría de los días, Shotaro se pasaba por la tienda y "tiraría la mierda", como sólo él podía decir. Shotaro trabajaba en el garaje de motocicletas de al lado con Sungchan, Hendery, y algunos otros que realmente no conocía demasiado bien todavía.

En general, la vida avanzaba bien. Excepto por Strony. Después de que Jaehyun fue herido, Strony se fue por un largo plazo a Luisiana y otros estados por asuntos del club. No había oído de él desde entonces y lo extrañaba mucho. Extrañaba hablar con él. Extrañaba las risas. Ni siquiera me dijo adiós.

Xiaojun colocó una taza de café hirviendo a mi lado, alistándose para ayudarme a guardar el resto de los cueros.

—¿Así que Jaehyun te va a recoger hoy? —preguntó, entablando una conversación.

—Sí. —Miré el reloj en la pared detrás del mostrador y sonreí—. Debería estar aquí en cualquier momento.

—¿Estás bien para trabajar de nuevo mañana, cariño? Hemos estado abrumados últimamente.

Le di una enorme sonrisa a mi amigo.

—¡Por supuesto! Me encanta estar aquí. No soy bueno en nada excepto en doblar prendas, pero disfruto mantenerme ocupado al mismo tiempo.

El infierno de Jaehyunحيث تعيش القصص. اكتشف الآن