Capitulo 50

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Me moví un poco de la cama y traté de alejarme de Marcos con gentileza tratando de no despertarlo, ayer llego un poco cansado de la reunión/entrenamiento que tuvo y últimamente no ha estado durmiendo muy bien por lo que menos quiero hacer es despertarlo.

— No te vayas— Dijo Marcos con la voz ronca tomándome de la cintura para acercarme nuevamente a él haciendo que se me erizara la piel.

—Tengo que organizarme— dijo sonriendo girando para verlo con los ojos cerrados, Marcos no tiene fuerza suficiente para abrir los ojos pero si para sostenerme con la suficiente fuerza para que no me aleje de él, pensar en eso me hizo reir un poco.

—No tienes— Se quejó sin abrir los ojos y yo le acaricie el cabello haciéndolo sonreír.

— Tengo— asegure — puedes dormir media hora más.

—¿Por qué te tienes que levantar ya? — Se quejó abriendo un poco los ojos.

—Por que Félix, Kyle, Mia y Ángel van a llegar en media hora— dije riendo, esta conversación ya la habíamos tenido anoche cuando Marcos se coló a mi habitación pero es muy caprichoso cuando tiene sueño.

—¿Por qué?

— Porque hoy es 26 de septiembre y tu gran amiga Samantha está cumpliendo años, y no se si recuerdas pero entre Félix, Kyle, Mia y Ángel le hicimos una torta— dije sonriendo con calma.

— Pero el pastel ya está hecho— se quejó abrazándome más fuerte— y eso lo sé porque los vi terminándolo.

— Lo sé, pero vamos a llevarlo a la casa de Samantha y eso tiene que ser antes de que Jack pase por ella para ir a la escuela.

—Se lo llevas a la escuela y ya está— dijo "Solucionando" el problema pero el está conciente que eso no es lo que hemos organizado con los chicos.

— No puedo hacer eso— dije riendo y el suspiro.

— En ese caso me levanto yo también y voy contigo— dijo intentando levantarse pero lo detuve.

— no puedes, recuerda que Los Wolf— Dije incluyendo a Jack en "Los Wolf"— deben ir a buscar el arreglo de flores que mandaron a hacer.

— Entonces me levanto ya— dijo Marcos riendo pero aun así lo detuve poniendo mi mano en su pecho.

—Duerme media hora más, Mike viene por ti para despertarte— dije y Marcos asintió con la cabeza dejándome esta vez salir de la cama.

— espera— dijo haciendo que me devolviera de la puerta de mi habitación para acercarme a él con confusión.

—¿Qué pasa? — pregunté sorprendiéndome cuando Marcos me dio un pequeño y rápido beso en los labios haciendo estallar un millón de mariposas en mi estomago.

—Ahora si puedes irte— dijo satisfecho haciéndome sonreír. 

Abrace a Samantha con fuerza mientras con una pequeña risa ella me corresponde el abrazo, no puede creer que nuestra Samantha esté creciendo tanto

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Abrace a Samantha con fuerza mientras con una pequeña risa ella me corresponde el abrazo, no puede creer que nuestra Samantha esté creciendo tanto.

— Ahora es una chica de 18 años, no puedo creer lo rápido que pasa el tiempo— dije con emoción.

—Muchas gracias a todos, no se debieron molestar— dijo Samantha sonriéndonos a todos.

—Mereces esto y mucho más— dijo James sonriendo abrazando a Samantha.

Como lo habíamos planeado Félix, Kyle, Mia, Ángel y yo le llevamos un pastel a Samantha mientras James, Mike, Liam, Marcos y Jack le llevaron un arreglo de flores, ellos se aseguraron de que las flores fueran de sus favoritas y que el arreglo estuviera a su altura y así como lo planeamos todos nos encontramos en la puerta de la casa de Samantha y ella realmente se sorprendió al vernos a todos.

— Esto es muy bonito, pero ya debemos ir al colegio— dijo Ángel viendo la hora en su celular.

—Menos mal los Wolf son una manada de lobos — dijo Malik apareciendo detrás de nosotros con una caja en sus manos que sorprendentemente entregó a Samantha dejándonos a todos en shock, nosotros habíamos tratado que Malik hiciera el pastel con nosotros pero se había enfermado esa semana por lo que no pudo hacerlo, así que el solo dio dinero a los Wolf para el adorno y dijo que no podía estar en la mañana en la casa de Samantha y sorprendentemente está aquí por alguna razón que no creo poder entender.

— ¿Qué tiene que ver lo de la manada de lobos? — preguntó Kyle confundido, el único que se atrevió a decir algo ya que todos estamos realmente sorprendidos como para decir o hacer algo y más que todo Samantha que solo se había quedado con el regalo en las manos viendo a Malik con confusión.

— Que tienen carros para llevarlos a todos a la escuela, si no fueran tantos no tendrían tantos carros— dijo Malik encogiéndose de hombros, como la casa de Samantha es un poco más apartada de la parada del autobús Liam y James nos van a llevar al colegio o ese era el plan inicial hasta que Ángel llevó su propio carro.

— ¿Qué haces aquí? — preguntó Mike a Malik.

—Dándole un regalo a Samantha— dijo Malik señalando la caja que traía antes— Feliz cumpleaños por cierto.

— Gracias— dijo Samantha con ahora una enorme sonrisa.

— ¿No estabas ocupado? — preguntó Jack y Malik asintió con la cabeza alejándose.

— lo estoy— dijo Malik despidiéndose con la mano para luego subirse a una moto que no teníamos idea que él tenía y desapareció.

— ¿Qué acaba de pasar? — pregunte confundida.

— nunca trates de entender las cosas que hace Malik— dijo Kyle negando con la cabeza.

— ¿Eso es una bomba? — preguntó Liam acercándose con inseguridad haciéndonos reír.

— Si fuera un bomba ya habría explotado— dijo Ángel viendo como Mike sacudió el paquete.

—Ábrelo— dijimos Mia, Marcos, Félix y yo al mismo tiempo, nos miramos sorprendidos durante unos segundos pero terminamos riendo..

Samantha abrió el regalo con todos nosotros viendo con atención cada uno de sus movimientos, y realmente nos sorprendimos cuando ella sacó de la caja unas pastillas y una carta.

— dos pastillas por día, si funcionan la semana que viene te llegará una dotación para un mes— leyó Marcos la carta y pude notar como los ojos de Samantha se abrieron con sorpresa al ver la etiqueta del tarro de pastillas.

— ¿Estás bien? — preguntó Mia y Samantha empezó a llorar.

— Sam, ¿todo está bien? — preguntó Liam con preocupación.

Samantha no respondió y solo siguió llorando aferrándose al frasco con pastillas, todos nos miramos confundidos pero terminamos dándole un abrazo grupal.

— Todo va estar bien— dijo Félix haciéndola sonreír. 

Rompamos la ventanaWhere stories live. Discover now