The Black House

22) El Ridgeback Noruego

Los días pasaron rápidamente y el comportamiento de Quirrell se volvía más irregular día con día, parecía más nervioso de lo habitual, algo que muchas serpientes habían notado. La presión que se ejercía hacia el profesor había disminuído mucho, todos esperando la gran jugada.
Algo que de igual forma notaron las serpientes menores fue el comportamiento divertido de Malfoy, parecía más feliz, de lo habitual y comenzaban a creer que traía algo entre manos, el día después del último partido había recibido un brutal castigo por manchar el nombre de la casa con un comportamiento tan salvaje y poco digno de un pura sangre, ¿Cómo y por qué el niño se atrevió a pelear tan tontamente con otro pura sangre?, cómo nada más que sucios Muggles, estaba fuera de su comprensión. La noticia había viajado rápidamente en los círculos y podría decirse que la bolsa de valores de los Malfoy comenzaba a caer peligrosamente debido a las acciones de su heredero, muchos comenzaban a cortar alianzas que habían durado desde la presencia de Abraxas Malfoy y con eso su trabajo estaba hecho, debía dejar que los Malfoy se relajaran, no le vendría tan bien que perdieran tanto dinero con medidas desesperadas.

-Expeliarmus- Murmuró Izar y el destello rojo salió disparado de su varita, chocando levemente con Tracey, haciendo que su varita saliera disparada golpeado la cabeza de Theo y distrayendolo lo suficiente para que Daphne le arrebatará su varita con el mismo hechizo, Blaise viendo su oportunidad de poder eliminar a uno disparo contra Daphne. Izar atravesandose adelante de la chica, hizo un movimiento con su varita, haciendo que el hechizo de Blaise fuera devuelto, el mismo rodó a un lado para esquivar, pero antes de ponerse de pie un segundo hechizo de Daphne, quién había salido atrás de Izar, lo impacto en el pecho, dejándolo fuera de combate.

-Eso es 5 a 0- se burló Black, chocando las palmas con una sonriente Daphne.
-Son patéticos, tienen la ventaja numérica y aún no pueden eliminar a uno solo de nosotros- se burló con altivez, levantando la perfecta nariz en el aire.
-Eso no es justo, Black tiene más experiencia-
-Y sin embargo los futuros enemigos tambien-
Theo se enfurruño, comenzando a maldecir con murmullos, realmente era injusto pero no podía quejarse.
-Mierda, para la siguiente los tendremos-
-Lo que sea, es momento de irnos, el toque de queda empezó hace una hora-
-¿No comentarás sobre nuestro progreso?-
-Solo puedo decir que no trabajan en equipo, cada uno busca lograr el objetivo a su manera-
-Algo que claramente Izar y yo hacemos muy bien- celebró Daphne, una sonrisa condecendiente apuntando a Theo y Blaise.
Ambos se habían enojado por esto, Blaise, al igual que Black, había sido entrenado, pero ligeramente diferente, Izar era una fuerza bélica y directa, era contundente como un puñetazo, por otro lado, Blaise había sido entrenado para ser sigiloso, una sombra en su trabajo, su fuerza mágica y habilidad marcial estaba muy lejos de ser como la de Black, pero aún era mejor que el resto, en un uno a uno contra los demás ganaría sin problemas, Theo había sido entrenado únicamente con fines políticos, si bien su magia era poderosa, aún no se comparo con los otros 3.
Daphne por su cuenta, estaba familiarizada con todo tipo de movimientos para la curación, la investigación de su vida se basaba en eso, aún con todo aprendió rápido y fácilmente cualquier hechizo o encantamiento, ese era su plus, la comprensión rápida.
En cuanto a Tracey, ella no era del tipo luchador, su magia no era tan potente como los otros 2 y siempre resultaba ser la primera en ser eliminada, pero resultó buena estratega. Cada uno de ellos presentó un punto fuerte o una debilidad, algo que se podía notar rápidamente.
Asintiendo con comprensión, todos comenzaron a avanzar hacia su sala común mientras su mente pensaba en lo dicho, saliendo del aula abandonada que siempre utilizaban para entrenar su duelo y nuevos encantamientos que cada uno sacaba de sus bibliotecas familiares. Habían comenzado su entrenamiento después de las revelaciones, más como que todos se habían unido al entrenamiento de Black, estaba de más decir que el niño mantuvo un amplio margen y no lo pudieron igualar.